La semana que viene habrá una reunión clave en la provincia. El ministro de Transporte, Jorge D’Onofrio lo quiere aplicar. Hasta ahora no se pide.
Mientras miles de viajeros recorren la provincia de Buenos Aires en la temporada de verano que estiman podría ser récord, las autoridades bonaerenses analizarán en las próximas horas si comienzan a aplicar el pase sanitario en los colectivos de media y larga distancia ante la fuerte suba de contagios.
Así lo confirmó el flamante ministro de Transporte provincial, Jorge D’Onofrio, quien dijo que el lunes se reunirá con su par de salud, Nicolás Kreplak para ver si comienzan a implementar esa herramienta en los viajes.
“Soy de la idea de que sea exigido el pasaporte sanitario para los micros de media y larga distancia. Este movimiento turístico que tenemos hay que acompañarlo con la mayor seguridad posible”, aseguró el funcionario, al analizar el alcance de ese instrumento en el sector transporte en medio de un incremento acelerado de personas contagiadas por la circulación de la variante Ómicron en simultáneo con la Delta.
Y agregó en diálogo con El Destape radio: “El pasaporte sanitario no solo brinda seguridad al que está vacunado, es un incentivo a quien no está vacunado o al que no se dio la segunda dosis”.
La provincia de Buenos Aires exige el pase sanitario desde el 21 de diciembre pasado para acreditar la vacunación y, de esta forma, estar habilitado para acceder a centros culturales, obras de teatros o recitales, gimnasios o canchas de fútbol 5, cines y eventos deportivos masivos; salones de fiestas y boliches, bares y restaurantes y organismos públicos y privados para la realización de trámites y para el personal que atiende al público, como así también ceremonias religiosas.
Alcohol Cero
Tras ser puesto en funciones el jueves por Axel Kicillof, el funcionario remarcó que el gobernador también le encargó trabajar para bajar los niveles de accidentes “evitables” que ocurren en las rutas y anticipó que se va proponer una normativa de Alcohol Cero porque discutir el 0,5 (de mg de alcohol en sangre) es como ‘hablar del sexo de los ángeles’, porque quizás a una persona le disminuya de una manera y a otra, de otra” la capacidad de reflejos al conducir.
En ese sentido, sostuvo que “hay incidentes más que accidentes que pueden ser evitados y para esto no se trata se endurecer las multas”. Y añadió: “Las multas no generan ningún cambio en la conducta de todos porque el que genera la multa la paga. Que no solo termine en la multa, sino que hay que generar cursos de entrenamiento obligatorio, suspensión del registro para conducir, trabajos comunitarios para reparar daños. Tenemos que generar un cambio cultural que nos permita bajar drásticamente la pérdida de vidas”.
En esa línea, dijo que también se va a proponer “alcohol cero porque me parece que discutir el 0,5 es realmente hablar del sexo de los ángeles, porque quizás a una persona le disminuya de una manera y a otra de otra, la capacidad de respuesta”.