Los discursos fueron similares a los planteos de los spots de campaña, más allá de algunas chicanas y de la contundente intervención del candidato libertario sobre derechos humanos.
Los cinco candidatos a la Presidencia protagonizaron este domingo el primer debate de cara a las elecciones generales del próximo 22 de octubre. El Centro de Convenciones Forum, gestionado por la Universidad Nacional de Santiago del Estero, fue el escenario en el que expusieron sus ideas siguiendo una serie de reglas Sergio Massa (Unión por la Patria, UxP), Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio, JxC), Javier Milei (La Libertad Avanza, LLA), Juan Schiaretti (Hacemos por Nuestro País, HNP) y Myriam Bregman (Frente de Izquierda y Trabajadores-Unidad, FIT-U).
En la primera parte del debate se plantearon ideas sobre economía, educación y derechos humanos. Dentro de ese bloque, más allá de los derechos a réplica para responder lo dicho por otro candidato, la exposición se dio en un marco de respeto, con pocas chicanas. Los discursos fueron similares a los planteos de los spots de campaña y a las entrevistas televisivas que han dado los candidatos.
Los protagonistas de ese primer segmento fueron Sergio Massa y Javier Milei, quienes utilizaron todos sus derechos a réplica solo en el debate sobre economía.
El primero en presentar su planteo sobre la economía fue Javier Milei. “Argentina está en decadencia. Por culpa de esta maldita casta política, si seguimos así en 50 años vamos a ser la villa miseria más grande del mundo. Argentina inició el siglo XX siendo el país más rico del mundo. Hoy estamos de mitad de la tabla para abajo. Tenemos más de 40% de pobres, 10% de indigentes, la inflación descontrolada y camino a la peor crisis de la historia argentina”, sostuvo el libertario. “Qué es lo que proponemos: hacer una reforma del Estado, bajar drásticamente el gasto público, simplificar el sistema tributario, desregular la economía, privatizaciones para sacarnos las nefastas empresas del Estado de encima y cerrar el Banco Central. Con este conjunto de reformas, en quince años podría estar alcanzando niveles de vida similares a los que tiene Italia o Francia. Si me dan veinte, Alemania. Y si me dan 35 a Estados Unidos”, resumió.
Sergio Massa, por su parte, pidió “disculpas” por “los errores de este gobierno que lastimaron a la gente”. “No era parte hasta asumir como ministro, pero pido disculpas”, dijo el candidato oficialista al iniciar su propuesta sobre economía. Anunció -entre otras iniciativas- una “moneda digital argentina, una ley de blanqueo para que los que tienen dinero en el exterior lo puedan usar libremente sin nuevos impuestos y subir penas de la ley penal cambiaria y tributaria, y cárcel a los evasores”. “En paralelo, vamos a subir las penas de lo que es la penal cambiaria y tributaria: cárcel a evasores y a los que fugan, para los que paguen impuestos no sean los tontos de la película”, agregó. “Vamos a un sistema tributario mucho más progresivo, vamos a seguir bajando el IVA a todos los trabajadores argentinos, vamos a seguir bajando impuestos como Ganancias y vamos a poner sobre la mesa cuáles son los beneficios de las empresas que te roban casi 4,5 del PBI con la protección de algunos sectores de la política argentina”, propuso.
A su turno, Patricia Bullrich, planteó como principal problema terminar con la inflación y destacó el hecho de tener a Carlos Melconian en su equipo. “Tres temas básicos: el primero, un programa claro y concreto, integral, que soluciones todos los problemas de fondo de la Argentina, ese programa lo tengo. Segundo, un equipo económico coherente y honesto, con Carlos Melconian a la cabeza. Ese equipo, ese liderazgo y esa realidad ya la tengo. Lo tengo a Carlos Melconian. Tercero, la decisión política, el temperamento y el coraje para hacer los cambios que la Argentina necesita, y ustedes saben que yo lo tengo. Ustedes han inventado y siguen con la inflación, yo voy a eliminar la inflación”, precisó la candidata de JxC.
Myriam Bregman, por su parte, puso en la palestra el problema del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) como principal escollo para el desarrollo de la economía nacional. “Cuando se discutió el acuerdo en el Congreso, con (Nicolás) Del Caño advertimos que era inflacionario y teníamos razón, como ahora advertimos que si seguimos por este camino del FMI las consecuencias para el pueblo trabajador van a ser mucho peores, no hay salida si no se desconoce esa deuda ilegal, ilegitima y fraudulenta”, expresó son solvencia, y añadió: “Ahora aparece Milei, mostrando sus ideas como novedosas, pero ya las conocemos, las aplicó Domingo Cavallo, otro gran empleado del FMI y fueron un desastre. Al revés de lo que él dice, para fortalecer la moneda, hay que nacionalizar el comercio exterior y terminar con la puerta giratoria de los dólares, porque dólares hay, lo que sobran son sus jugadores”.
Juan Schiaretti se centró en la problemática del déficit fiscal y puso como ejemplo a su provincia. “Los dos últimos gobiernos destruyeron la economía nacional. Y la verdad que la causa de la destrucción es que siempre gastaron más de lo que les ingresa porque el hilo conductor de toda la inflación en la Argentina fue siempre el déficit fiscal. Y lo digo yo que en Córdoba no tenemos déficit fiscal”, precisó el candidato cordobés. “Para acabar con el déficit fiscal no es necesario hacer un ajuste salvaje, sino que es necesario tomar las medidas adecuadas porque hay más de 10 puntos del PBI entre la superposición de posiciones entre Nación, provincias y municipios; el déficit de las empresas públicas; los subsidios a la economía y la evasión impositiva”, presentó.
Las chicanas y cruces recayeron principalmente sobre el ministro de Economía y candidato de UxP por ser parte del Gobierno y no poder dar respuesta al problema de la inflación. No obstante, el ministro se diferenció de la gestión actual en varios momentos del encuentro, para plantear que en caso de ser Presidente ese va a ser su gobierno, distinto al de Alberto Fernández.
En tanto, en el debate sobre educación, todos los candidatos acordaron en su defensa, como motor del cambio social y del progreso hacia el futuro. Las principales chicanas recayeron sobre Javier Milei y el sistema de vouchers que propone, y la posible privatización de la educación pública, aunque el libertario evitó mencionar ese mecanismo.
En materia de propuestas, se destacó la intervención de Massa, quien indicó que envió al Congreso un proyecto de ley que establece una suba de 6 a 8 puntos del PBI la inversión mínima en educación, con objetivos como “la construcción de 731 centros de desarrollo infantil y jardines de infantes; plan de alfabetización de primer a tercer grado; las materias de matemática, robótica, programación e inteligencia artificial como obligatorias en cuarto y quinto año, y la duplicación de escuelas técnicas”. También propuso impulsar un “1,5 del PBI” para “ampliar la oferta universitaria” y un “fondo” dentro de los 8 puntos educativos para el “presentismo”, de forma tal de garantizar a “los pibes en las aulas y a los maestros”.
Por su parte, Bullrich consideró que si Sarmiento “viera lo que está pasando en la escuela pública” en el país, “les pondría un cero y los manda a marzo”, y alertó que se está “destruyendo el futuro de los chicos”. Además, acusó al peronismo de ser “aliado a los gremios” y aseguró que con un eventual Gobierno suyo “la historia de los paros y el adoctrinamiento se termina de una vez y para siempre”. También se comprometió a garantizar los “190 días de clase” y propuso declarar a la educación “servicio esencial” para que “las huelgas sean fuera del horario de clase”. Al dirigirse a Milei, le recordó que durante las protestas por el confinamiento por coronavirus y el reclamo de que se abrieran las aulas, el candidato libertario “gritaba que no se abrieran nos íbamos a contagiar”. “No te importa la educación; andá con el voucher a la puna, donde hay una sola escuela; no conocés Argentina, planteás un modelo para la ciudad (de Buenos Aires), y el país es más que la Ciudad”.
A su turno, Milei señaló que los partidos tradicionales son los responsables de que “el 13% de los chicos no termina el colegio en tiempo y forma”, con el “agravante de una situación donde el 60% de los chicos son pobres”, y expuso que LLA plantea la “idea revolucionaria de implementar capital humano”, que tiene una atención de “primera generación” que consiste en “salud, alimentación y la educación”. Señaló que su propuesta consiste en cambiar la forma en que el Estado financia la educación pasando a financiar “la demanda” y no solventando “la oferta”, como ocurre en la actualidad. Además, Milei acusó a “los radicales” de financiarse políticamente con las universidades.
Por su parte, el candidato de Hacemos por Nuestro País pidió que la Nación “deje de superponer funciones a las provincias” y “que les pase los recursos con coparticipación”, de modo tal de que los distritos puedan garantizar una “buena educación”.
En tanto, la postulante del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), Myriam Bregman, señaló que “si la educación sigue en pie es gracias al esfuerzo cotidiano de la docencia, donde la mayoría son mujeres y son ellas que se hacen cargo de los problemas todos los días”.
En el tercer ítem de la primera parte, derechos humanos, sin dudas la más llamativa fue la exposición de Javier Milei, donde el libertario tomó el discurso más radical, que se le había escuchado principalmente a su compañera de fórmula, Victoria Villarruel, y negó abiertamente que los desaparecidos en la última dictadura militar sean 30.000, y expuso la “teoría de los dos demonios” al hablar de “guerra”.
Los demás candidatos abogaron por mantener un apolítica de derechos humanos, incluso Schiaretti habló en primera persona de su padecimiento durante varios procesos de dictadura, donde fue víctima de represión y perseguido.
Massa planteó avanzar en una agenda política que ponga en debate nuevos derechos humanos, como los referidos al ambiente, la salud, tras resaltar lo hecho durante los últimos 40 años de democracia, desde el Juicio a las Juntas hasta la reactivación de los juicios a genocidas durante los gobiernos kirchneristas.
Preguntas cruzadas
En tanto, la media hora final, en la que se formularon las preguntas cruzadas, fue la más intensa, en la que los candidatos buscaron el contrapunto personal y el impacto mediático.
En esa instancia, Massa le pidió a Milei que le pidiera disculpas al Papa Francisco por sus insultos, cosa que el libertario dijo haber hecho en su momento y aseveró que “lo volvería a hacer”, pero no lo hizo en el debate, ante la pregunta del candidato de UxP.
De igual modo el candidato libertario le preguntó a Bregman por qué defiende el comunismo, a lo la candidta del FIT-U le respondió que ella es socialista, y que al hacer esa pregunta usa frases y datos “del Rincón del Vago que seguro le pasó (Mauricio) Macri”.
Por su parte, la candidata de izquierda sumó la agenda de género que quedó afuera del debate y le preguntó a Milei si niega el patriarcado por ignorancia o por machismo. El libertario intentó una respuesta poniendo como ejemplo una empresa, chicaneando con la frase “usted no entra a las empresas”, y aseverando que se iba a encontrar con mitad hombres y mitad mujeres.
Los cierres
Al final del debate, cada candidato contó con un minuto para cerrar su propuesta, y dejar un mensaje sintético sobre los principales puntos del primer encuentro, que tendrá una segunda instancia el próximo domingo 8 de octubre.
Myriam Bregman
“Más allá de las frases hechas, ningún candidato pudo ocultar que son todos cómplices del poder económico. Vos sabés que nosotros no, porque peleamos por construir una sociedad sin ningún tipo de explotación u opresión. Nos ves en cada lucha. Este 22 de octubre demostremos que somos muchos y muchas que no queremos seguir pagando al FMI con el hambre del pueblo. Los que no queremos que los trabajadores sigan perdiendo, que no queremos que sigan destruyendo el planeta porque no hay planeta B. Las que decimos que no nos digan otra vez más que tenemos que esperar. No te resignes, votá con tus convicciones. Vamos con la izquierda en todo el país, en las calles y en el Congreso. Otra cosa más: Son 30 mil y fue un genocidio”, cerró, dando respuesta al discurso de Milei en el segmento de derechos humanos.
Sergio Massa
“La Argentina tiene tres caminos: uno ya lo conocemos, es la vuelta al pasado, el otro es un salto al vacío y la locura. Después, un camino de producción y trabajo. Quiero invitarte a que construyamos una Argentina donde convoquemos a un gobierno de unidad nacional. Quiero invitarte que pongamos el trabajo y la distribución del ingreso como valores centrales para la construcción de la Argentina. Quiero que construyamos de nuestras exportaciones la potencia de nuestras reservas, pero sobre todo las cosas el valor de nuestro trabajo. Quiero que construyamos más federalismo, porque Argentina necesita mejor distribución a lo largo y ancho del país. Sobre todo, quiero pedirte: a la urna, no vayas con bronca ni con odio. Andá con esperanza”, aseveró.
Patricia Bullrich
“Hoy estamos frente a la batalla final, pero para transformar la Argentina no alcanza sólo ganarle en las urnas, hace falta generar cambios profundos y verdaderos, que duren, porque siempre están amenazando. Por eso la única forma de hacerlo es con coraje, con poder político, y hoy nosotros tenemos poder político propio con gobernadores, con intendentes, con mayorías en el Congreso y con ustedes, la gente. Por eso te pido que nos acompañes, que nos votes, que pienses que Juntos por el Cambio es la única oposición que va a garantizar el cambio de lo que el kirchnerismo arruinó en la Argentina. Yo no doy el brazo a torcer, yo no voy a negociar el cambio nunca. Yo te pido, por favor, acompañame. Y te quiero decir: viva la Patria”, remarcó.
Javier Milei
“A lo largo de este debate hemos escuchado la posición de algunos candidatos que parecen que son marcianos, como si no hubieran tenido nada que ver en la debacle que llevamos sufriendo 40 años. No hay locura más grande, nada más demencial, que creer que uno puede tener resultados distintos haciendo siempre lo mismo. Venimos a proponer es el modelo de la libertad. Aquellos países que son más libres, son ocho veces más ricos que los reprimidos. El decil más bajo de la distribución esta once veces mejor que su par en el reprimido. Hay 25 veces menos de pobres en el formato estándar y 50 veces menos que en el formato extremo. La gente vive un 25% más. Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre. Sin embargo, quiero decirles que hay esperanza. Un futuro mejor es posible, pero ese futuro es posible si es liberal”, concluyó.
Juan Schiaretti
“Es mentira que estemos condenados al fracaso. Es mentira que estemos condenados a tener siempre alta inflación. Es mentira que tengamos que estar siempre gobernados por la grieta. Es hora de que Argentina tenga un Gobierno que gestione bien”, expresó, y concluyó: “Han visto a los candidatos de la grieta que ya fracasaron como gobierno: Sergio Massa y Patricia Bullrich que representan al kirchnerismo y al fracaso de Macri. Han escuchado a otro candidato que propone cosas que resultan un viaje a lo desconocido, además de las cosas tradicionales que plantea la izquierda. Yo ofrezco mi experiencia de Gobierno”.