Horacio de San Joaquín, integrante de la Comisión Directiva del Taller Protegido “Mi Refugio” y vocero de esta entidad, contó su alegría por la inauguración y dio su testimonio sobre esta grata noticia.
“Es algo que queríamos lograr desde hace mucho tiempo, ya que no dábamos curso a ningún tipo de fiesta porque los vecinos se enojaban. Entonces decidimos pasar al rubro de fiestas infantiles, logrando, después de una larga lucha, las habilitaciones correspondientes. En su momento nos preguntamos cómo llegar a una inclusión, empezamos desde abajo y hoy tenemos juegos de inclusión donde cualquier chico con discapacidad puede participar de ellos festejando su cumpleaños con chicos normales que también se integrarán de chiquitos con la problemática de la discapacidad actualmente”, dijo.
“Estamos trabajando con la señora Alicia, partícipe de este proyecto, y sin dudas esto generará ingresos que van a mejorar la calidad de vida de los chicos y la institución. Haremos un período de prueba de sólo 6 meses y esos ingresos que genere el salón se volcarán a otras instituciones o a dicho salón para que siga creciendo”, indicó San Joaquín.
“¿Ofrecerán servicios en el salón de fiestas?”: “Diría que sí; estas cosas tienen su costo, pero sentándose a conversar se puede hacer todo lo que esté al alcance para brindar un buen servicio”.
“Hoy las instalaciones están casi a estrenar: cocina individual de la institución sólo para el salón de fiestas con heladera, freezer y horno pizzero. También hay un castillo muy importante de 8×4, juegos de inclusión, metegol, pelotero chico y grande. Es un salón de fiestas bastante completo, y en un principio pensábamos meter 30 chicos, pero la capacidad son 300 m² así que tranquilamente pueden entrar 40 o 50. Tenemos equipo de música, calefacción y espacio para que los chicos jueguen. Al fondo disponemos de una parrilla con un patio bastante importante que por el momento no permitiremos que se juegue con pelota porque todavía los tapiales están bajos, y a medida que el salón avance pondremos caños y redes altas para que ninguna pelota se vaya y moleste a los vecinos aledaños”, dijo.
“¿Cuántos chicos están trabajando en el taller que efectivamente se verán beneficiados con esto?”: “Nuestro plantel hoy está conformado entre 27 y 32 chicos. Ellos siguen fabricando bolsas de polietileno en diferentes medidas, bolsas de papel para farmacias; hemos parado un poco la producción de cepillos y escobas porque evidenciaba un insumo muy grande e inconseguible en la zona con el consecuente costo elevado. Logramos tener 5 máquinas nuevas y unificadas con las cuales ya podemos soldar la friselina (material ecológico utilizado en bolsas de mercados). Les damos el desayuno todos los días, un plato de comida y un vaso de jugo de lunes a viernes, trabajando de 8 a 13hs”.