Nuestro Multimedios dialogó con Marcelo Torres, diputado provincial por Zárate del FpV. El diputado abordó este tema tan importante para la sociedad “Siento que el Gobierno se quedó corto al reglamentar esta ley porque es una terapia, y como toda terapia moderna que recurre a curas más prolongadas, el autocultivo no es un dato menor, sino que asegura la prohibición del aceite de cannabis. Es muy bueno que lo debatamos porque me saqué los prejuicios de encima para investigar sobre este tema, me costó, tuve que hablar con muchas madres, quienes me fueron orientando acerca de todos los cambios que sus hijos sufrieron con los tratamientos. El Estado debe garantizar, no impedir”, dijo.
“¿Cómo se regula el autocultivo para no terminar en lo que todos conocemos?”: “Este es un estado moderno, pero estamos acostumbrados a cosas viejas; en Uruguay se ha armado un registro de consumidores, que no sería nuestro caso. Acá también hay que armar un registro, autorizaciones para cultivar en espacios cerrados, reducidos, acotados y controlados. También lo vi en Chile, en donde una asociación civil regula la siembra, y el laboratorio más importante produce el aceite de cannabis con el insumo provisto de la Fundación”.
“Estamos hablando de algo que puede, tranquilamente, revolucionar la existencia de millones de personas que conviven con el dolor; tengo cerca de 20 testimonios cotidianos cercanos a mí donde consumieron el aceite y les mejoró rotundamente la calidad de vida”, afirmó.
¿Qué medidas se tomarán desde la Banca?: “En principio, el miércoles próximo (4 de octubre) nos reunimos en La Plata con todos los actores sociales, profesionales, universitarios y técnicos para discutir sobre la reglamentación, y en 2018 tengo previsto participar de una Jornada, en la que en mi rol de ciudadano común, seré uno de los organizadores”.
“Digo esto porque el impacto que está teniendo ya es masivo: se ha autorizado al INTA y al CONICET la investigación y el control de áreas de cultivo. El Estado puede supervisar las plantaciones y el autocultivo, ya que aseguran la prohibición del aceite, sin pasar por la importación y menos que menos conseguirlo en el mercado clandestino. Debemos ser claros porque sino hablamos de cosas abstractas; todos los países que han avanzado en la legislación con respecto al control del cultivo bajaron considerablemente los índices de droga”, expresó para finalizar.
Comunicado de Torres
CON GUSTO A POCO: REGLAMENTACIÓN DEL USO MEDICINAL DEL CANNABIS
Pasados 50 días de que venciera el plazo legal, el gobierno reglamentó parcialmente la ley que autoriza el uso terapéutico del cannabis.
“Es un primer paso, y lo celebramos, más por su repercusión mediática que por haber dado cuenta del reclamo central de las organizaciones que promueven este derecho: la posibilidad del autocultivo” explicó el Diputado Torres.
“Para quienes desde la política acompañamos su lucha por hacer efectivo estos derechos, consideramos que acotar severamente el alcance una ley mediante su reglamentación, vulnera principios constitucionales”, agregó el legislador.
Entre los artículos e incisos no reglamentados por el Poder Ejecutivo, se encuentran, por ejemplo: “promover medidas de concientización dirigidas a la población en general; proveer asesoramiento, cobertura adecuada y completo seguimiento del tratamiento a la población afectada que participe del programa.”
“En la provincia acompañamos desde el primer momento a los familiares de los pacientes que se acercaron para encontrar solución a sus problemas. A tal fin, generamos instancias de debate, difusión y concientización, que culminaron con el Primer Congreso Internacional de Cannabis y Salud que se realizó en nuestro país, donde profesionales, organizaciones, universidades, juristas y diputados aportaron masa crítica a la propuesta” recordó el Diputado Marcelo Torres. En consonancia, el legislador fue autor e impulsor de dos proyecto de ley de su autoría en la Legislatura Bonaerense para que las obras sociales y prepagas cubran el médicamente y otro para adherir a la Ley Nacional 27.350 de Uso Medicinal de la Planta de Cannabis y sus derivados.
“El camino recorrido hasta la fecha nos reconforta, pero falta; el fin último que se persigue con este derecho es responsabilidad colectiva y social: atenuar el dolor” culminó.