Hace algo más de dos temporadas que Defensores Unidos tiene una muy fuerte localía. De los últimos 40 partidos como local, sufrió solamente tres derrotas.
Siempre se dice que el ámbito del fútbol y principalmente del ascenso, que tener una buena local es clave para conseguir objetivo. Sin embargo del dicho al hecho, siempre hay variables que hacen que ese anhelo sea muy complicado conseguirlo. No obstante, Defensores Unidos sí puede decir que el Gigante de Villa Fox se ha transformado en una verdadera fortaleza. Tal es así, que en las pasadas dos temporadas, el gran protagonismo que tuvo el “celeste” en la Primera “C” (que lo llevaron hasta la final del Reducido en la 2016-2017 y a ser campeón en la 2017-2018) se debió a que Defensores fue casi imbatible ante su gente y muy pocos fueron los equipos que pudieron llevarse algo de su visita a Zárate. Más allá de la dirección técnica de Gustavo Pue-bla en un primer momento y luego Darío Lema; y también de tener distintos planteles, CADU transitó casi el mismo camino. Vencer a casi todos los que venían a su casa. Y la verdad que todo esto está bien asentado en los números. En Villa Fox, Defensores logró casi un 75% de efectividad. Sí, leyó bien, casi las tres cuartas partes de los puntos disputados. Para ser más precisos, de los 40 partidos que jugó contando las últimas dos temporadas de la C y este arranque de la B Metropolitana, sólo perdió tres y obtuvo 26 triunfos, con 11 empates. O sea, de los 120 puntos que hubo en juego como local, CADU logró 89. Una estadística impresionante, que le permite a este plantel y su gente ilusionarse con salir de este pequeño pozo en el que está metido y extender esta gran racha en Villa Fox.