Fueron los alimentos que más aumentaron en 2018 y hoy una familia, para cubrir sus necesidades mínimas, debe pagar un 59% más por esos artículos.
En la Ciudad de Buenos Aires, el rubro de la canasta alimentaria que más plata demandaba había sido tradicionalmente el de las carnes. Pero en 2018, los impresionantes aumentos en la harina, cereales y derivados lograron que este grupo de artículos se haya convertido, desde septiembre pasado sin excepción, en el de mayor peso de toda la canasta, algo inédito en al menos cinco años.
Según datos publicados por la Dirección de Estadística y Censos de la Ciudad, de los $13.194 que precisó en diciembre una familia tipo (pareja de 35 años con dos hijos chicos) para alimentarse, $3584 fueron para adquirir estos productos, que incluyen harina de trigo, pan, fideos, facturas, galletitas, pan rallado, tapas para tartas y empanadas, pizza, arroz y lentejas.
En el caso de una pareja de jubilados, el esquema se repite: según el cálculo oficial, para el conjunto de cereales, harinas y legumbres de su canasta de alimentos necesitaron en diciembre $ 1809, superando los $ 1679 del gasto en las carnes y los $1577 de los vegetales.
Sólo los aceites mostraron un alza mayor (60,7%). Las carnes incluidas en la canasta de alimentos de la Ciudad, en cambio, subieron un 47,8% anual, las frutas y verduras un 44,3%, los lácteos un 41,2% y las bebidas, un 40,6%.
Según especialistas consultados, la principal causa del fenómeno hay que buscarla en el salto del dólar, cuya cotización se disparó un 105% en 2018, pasando de $18,92 a $38,85.
Fuente: Clarín