Este sábado, Zarate Básket visitará a Unión de Mar del Plata, buscando otro paso de recuperación. Guillermo Bogliacino dirigirá al equipo y tendrá la incorporación de los refuerzos Casinelli y Méndez.

Es cierto que la victoria ante Argentino de Pergamino les sacó una pesada mochila sobre sus hombros y les trajo cierta tranquilidad, dentro de un marco convulsionado por lo que se vivió en las últimas semanas alrededor del plantel en relación a los cortes de jugadores (una decisión que aparentemente provino desde la Municipalidad y no desde la dirigencia del Club Unión de Zárate), que derivó en la renuncia del cuerpo técnico, teniendo en cuenta que las salidas de Sánchez y Alloco fueron sin el consentimiento de Comelli y Cichero. De todas maneras, el conjunto zarateño logró reponerse y reencontrarse con la victoria, tras siete cotejos y ahora intenta iniciar un nuevo camino con la llegada del nuevo DT, Guillermo Bogliacino, más los refuerzos Casinelli y Méndez. Y para este barajar y dar de nuevo, Zárate Básket afrontará un compromiso que está al alcance de la mano, ya que este sábado visitará a Unión de Mar del Plata. Un rival que viene de dos caídas al hilo y está en zona del cruce por el descenso.
De todas formas, la clave para la nueva presentación de Zárate Básket, no estará en el adversario que tendrán enfrente sino en cómo se adaptarán tanto los refuerzos, como el resto del plantel a la idea que proponga el nuevo DT. Algo que puede llevar un tiempo, más allá del resultado de mañana. Está claro que tanto Casinelli como Méndez tiene como mayor virtud, su poder de anotación, algo que puede ser beneficioso. El tema será en leer buen el partido y distribuir la ofensiva acorde a la necesidad del equipo, teniendo en cuenta que tendrá anotadores natos en todas sus posiciones. El punto, quizás negativo, parece ser que el plantel quedó desbalanceado en la zona pintada, ya que no tiene a Alloco (era el primer recambio de Barreto) y los dos refuerzos son jugadores perimetrales, lo que muestra a las claras que deberán ser un equipo más dinámico debido a la falta de altura.
En definitiva, Zárate Básket se presentará mañana en Mar del Plata, con caras nuevas, pero con un mismo objetivo de conseguir más felicidad y tranquilidad, buscando recuperar el terreno perdido en la tabla.








