El equipo, portátil y de bajo costo, se utilizará en los transmisores del satélite SABIA-Mar (SAC-E) que, una vez en órbita, tendrá como objetivo la observación de la Tierra con aplicaciones prioritarias en el estudio del mar y de costas.
El dispositivo, desarrollado por investigadores de la Facultad de Ingeniería de la UNLP, puede aplicarse en los transmisores que envían sus señales en el Sistema Satelital Argentino de Recolección de Datos Ambientales (DCS), a través de plataformas que pueden ubicarse en sitios remotos y de difícil acceso del planeta. Es un equipo portátil y de bajo costo. Se utilizará en los transmisores del satélite Sabia-Mar (SAC-E) que, una vez en órbita, tendrá como objetivo la observación de la Tierra con aplicaciones prioritarias en el estudio del mar y de costas. Además, puede utilizarse con los transmisores del sistema global Argos y el sistema brasileño (SCD). Todos ellos utilizan la banda de 401MHz.
Este desarrollo fue realizado por Pedro Rosito, quien se recibió esta semana de modo virtual como ingeniero electrónico, defendiendo su trabajo final de carrera “Implementación de un sistema de homologación de plataformas transmisoras para los sistemas DCS con aplicación multiplataforma”. El joven profesional llevó adelante la investigación, durante más de un año, bajo la dirección de los ingenieros José Juárez y Adrián Carlotto, del Grupo de Investigación y Desarrollo en Comunicaciones Digitales (GrIDComD).
El DCS es un sistema en el que se recolectan datos adquiridos por plataformas satelitales autónomas DCP (Data Collection Platforms), fijas o móviles. Éstas pueden encontrarse en la superficie terrestre, sobre boyas en los océanos y ríos, o en globos, entre otros. Los datos generalmente se corresponden con variables del medioambiente de la plataforma. Estos mensajes son procesados por el receptor del sistema ubicado en los satélites, luego almacenados y finalmente, transmitidos a las estaciones terrenas argentinas para su posterior procesamiento y distribución a los usuarios de ciencia.
“El problema es que, como se trata de un sistema donde se comparte el canal y todos transmiten en la misma frecuencia pero sin ningún tipo de sincronización, hay que tener cuidado con la duración de la transmisión de cada plataforma, con la potencia, con el período de repetición y otros parámetros porque puede ocurrir que desde el satélite se escuche a unas pocas plataformas en particular. La idea es que se puedan escuchar todos los mensajes de todas las plataformas durante todas las pasadas de los satélites”, señaló Carlotto.
El ingeniero agregó que, las agencias espaciales deben homologar las plataformas que van a transmitir a los satélites para que el sistema funcione correctamente y sin conflictos.
En este sentido, el aporte de los ingenieros de la UNLP es que lograron implementar un sistema de medición, a partir de un hardware diseñado para recibir señales de televisión digital y una notebook que contiene un programa desarrollado por Rosito. “Es un equipo de bajo costo y portable. Se está desarrollando el sistema adaptado a un teléfono celular. Con este desarrollo, que se podrá llevar en el bolsillo, se podrá medir todos los parámetros de la señal transmitida y ver que la plataforma funciona correctamente, en especial en los sitios de instalación, incluso estando a unos kilómetros”, destacó Juárez.
Sobre la elección de este tema para su trabajo final, Rosito expresó que “es muy interesante ya que es fundamental contar con un sistema de homologación para poder utilizar el día de mañana en nuestras propias plataformas transmisoras para nuestro propio sistema DCS. Me gustaba la idea de encarar un proyecto que me llevara a aprender varias cosas nuevas, que fuera un desafío”.
El ingeniero agregó que, “ya contábamos con el conocimiento y con cierta experiencia en el uso del Dongle Rtl-sdr que se utiliza para recibir la señal de la plataforma transmisora. El Dongle es un aparato de bajo costo, pequeño y por tanto fácil de trasladar, por lo que era el dispositivo ideal para cubrir la etapa de muestreo de la señal. Por otro lado, el entorno de desarrollo utilizado para crear el software, Qt, permite implementar con relativa facilidad el código necesario para llevar el sistema en un futuro a un celular”.
Respecto a la presentación virtual, Rosito aseguró que “la experiencia fue muy buena. Claramente, hubiera preferido rendir de manera presencial frente a mi familia y amigos. Pero es destacable cómo se pusieron a disposición tanto mis directores como la Cátedra de Trabajo Final para que pudiera finalizar con el trabajo de la mejor manera y haciéndolo lo más parecido a lo que hubiera sido si no estuviésemos en esta situación”.
Además de la medición y homologación de las plataformas, los integrantes del GrIDComD trabajan en todos los sub-sistemas que componen al DCS, desde el receptor que va en el satélite, hasta los transmisores que están en Tierra como así también lo referido al procesamiento de datos.
Cabe mencionar que esta unidad de investigación formó parte de la misión SAC-D dentro del Plan Espacial Argentino desarrollado por la CONAE (Comisión Nacional de Actividades Espaciales). Fue el cuarto satélite argentino de observación de la Tierra de la línea SAC (Satélite de Aplicaciones Científicas), que llevó como carga útil un receptor del sistema DCS diseñado e implementado íntegramente por el GrIDComD. El SAC-D fue lanzado exitosamente el 10 de junio de 2011, desde California, EEUU.
La próxima misión satelital argentina SABIA-Mar, será una fuente de datos importante para estudios del color del mar a nivel regional y un aporte significativo a nivel internacional.