Seis de cada diez argentinos con coronavirus desconoce dónde y cómo contrajo el virus, según los datos del Ministerio de Salud de la Nación, que ubica en 59% el porcentaje de casos por transmisión comunitaria en el país, una cifra que ya se ubica muy por encima a la que indica los positivos por contacto estrecho.
De acuerdo al último reporte emitido esta mañana por la cartera sanitaria, el total de casos confirmados en Argentina es de 276.072 (49,1% mujeres y 50,9% hombres). De esos, 1.143 (0,4%) son importados, 71.620 (25,9%) son contactos estrechos de casos confirmados, y 162.959 (59%) son casos de circulación comunitaria, mientras que el resto se encuentra en investigación epidemiológica.
En tanto, en la provincia de Buenos Aires el porcentaje de contagios por transmisión comunitaria es mucho mayor: se eleva al 66,4%. Asimismo, en territorio bonaerense un 13,9% de los casos están vinculados a un caso estrecho, 12,4% aún continúa en investigación y un 6,1% corresponde al personal de la salud, índice que viene en baja.
Como viene informando DIB, que la mayoría de los casos sean por transmisión comunitaria, es decir, que las personas desconozcan dónde se contagiaron, complica la estrategia de detección porque encontrar los contactos estrechos de los positivos de coronavirus resulta clave para identificar a los potenciales portadores del virus, aislarlos, hisoparlos y así terminar con las cadenas de contagios. Si no hay nexo es más difícil trazar el mapa epidemiológico para frenar la expansión.
Cabe señalar que a las áreas con transmisión comunitaria del virus -que ya se registra en diversas zonas de 13 jurisdicciones- se sumó hoy la localidad de Casilda en la provincia de Santa Fe.
La Organización Mundial de la Salud sostuvo este viernes que para impedir la propagación del coronavirus es central controlar la transmisión comunitaria.
Michael Ryan, director ejecutivo de la OMS y jefe del programa de emergencias sanitarias, sostuvo que “hay que eliminar los focos de infección” y reconoció que las medidas preventivas están disminuyendo entre la población de todo el mundo y que, tras el confinamiento, la gente ha adoptado comportamientos que favorecen la propagación.
“Siete meses después de la declaración de emergencia de salud pública internacional sabemos muy bien cuáles son las medidas que tenemos que tomar para frenar la expansión del virus. Sin embargo, no conseguimos implementarla”, declaró por su parte la directora de la unidad de zoonosis y enfermedades emergentes de la OMS, Maria Van Kerkhove.