Los osos pardos que hay dentro y en los alrededores del Parque Nacional de Yellowstone permanecerán protegidos por leyes federales.
Así lo ha decidido Dana Christensen, jueza federal del estado de Montana, que ha cancelado la que iba a convertirse en la primera cacería desde hace casi tres décadas, al igual que hizo el mes pasado en Idaho y Wyoming.
Los osos que viven en los alrededores de Yellowstone fueron clasificados como una especie protegida en 1975 después de que casi todos los ejemplares fueran abatidos y la población apenas alcanzara los 130 animales. En 2007, el Servicio de Pesca y Vida Salvaje de Estados Unidos aseguró que el número de osos se había recuperado y alcanzaba los 700, por lo que ya no necesitaban estar dentro del plan de especies protegidas.
Sin embargo, un juzgado paralizó esa petición y pidió a los agentes de la naturaleza que se estudiara si la desaparición de una de sus fuentes de comida, las semillas de pino blanco, podría amenazar la supervivencia de estos animales.
Diez años después, los agentes decidieron que los osos no corrían ningún peligro y que se debían levantar las protecciones federales tanto para ellos como su hábitat.
Fuente: El Confidencial