ARGENTINA HOY… Y MAÑANA

Por Eduardo Rivas – La última semana se conocieron dos encuestas de opinión que midieron el ‘humor social’ de los argentinos y quedó expuesto que Luca Prodan tenía razón.

¿A qué nos referimos con esto? A que el músico ítaloargentino cantaba en los ’80 ‘No sé lo que quiero, pero lo quiero ya’.

El trabajo de Zuban Córdoba expuso como la mayor parte de los encuestados rechazan el accionar del gobierno en igual proporción que los que la situación actual del país les genera sentimientos negativos.

Esta opinión está claramente condicionada por la dura realidad económica que enfrenta el país, agudizada tras la asunción del Presidente Milei en diciembre pasado.

Sin embargo, y curiosamente para la idiosincrasia argentina, típicamente tanguera y pesimista, el Índice de Confianza del Consumidor subió por cuarto mes consecutivo, y lo hizo de una manera mucho más pronunciada que lo que ocurrió hasta ahora. Sin embargo, el informe de la Universidad Torcuato Di Tella exhibe que las Expectativas Futuras cayeron un 0,6%… los argentinos no confían en el futuro que les propone Milei.
Lejos aún del pico que alcanzó tras la elección presidencial, pero recuperándose poco del valle producto de las primeras medidas de gobierno, los argentinos confían en el gobierno de Javier Milei.

Los argentinos reclaman soluciones ya, no confían en el futuro, porque como decía Luca, no sé lo que quiero, pero lo quiero ya.

Porque si bien es claro que la principal petición es económica, y la caída en la confianza del consumidor expone que la realidad económica es vista como consecuencia de las medidas de gobierno, algo que ya hemos visto en artículos anteriores, aunque parezca contradictorio, el presidente Milei sigue contando con excepcionales niveles de aceptación.

En los próximos días habrá una nueva entrega de esta saga del Gobierno Milei con la discusión en el Senado de la Nación de la Ley Bases que lejísimo está del proyecto original y bastante apartada de la media sanción lograda en la Cámara de Diputados.

En dicha votación, y su posterior debate en revisión en la Cámara Baja, comenzará a develarse lo que por ahora no es más que una intención de deseos y a cristalizarse si el futuro es lo negativo que se imagina o no… o si las condiciones presentes se prolongan en el tiempo, imaginando que a la par de ello mejoren las situaciones económicas de la población, presentes y futuras, y además de Sumo comience a sonar Vox Dei y su ‘Cuanta verdad hay en vivir solamente el momento en que estas si el presente… el presente y nada más’.