ARGENTINA Y SUS DOS BANDERAS

Por CLAUDIO VALERIO – El 20 de junio de 1820 a las 7 de la mañana, en la más absoluta pobreza y olvidado por sus contemporáneos, falleció el Abogado y General Manuel Belgrano. Tenía 50 años de edad. Un día antes de morir y como no tenía dinero para pagarle a su médico, le entregó el único bien que poseía, su reloj de bolsillo de oro, que lo había recibido como regalo del rey Jorge III de Inglaterra. La lápida de su tumba fue improvisada con el mármol de una cómoda de su casa y en ella fueron escritas estas palabras “Aquí yace el general Belgrano”.

Todo argentino debería conocer la historia de este prócer argentino, de carácter polifacético y uno de los padres de nuestra patria; porque toda su vida fue de entrega y porque todo lo que tuvo, todo lo hizo, fue para el bien común. Sería una visión simplista rotularlo como quien fuera el “creador de la bandera nacional”, la que fuera diseñada con los colores celeste y blanco, a partir de los de la escarapela nacional.

La bandera argentina, la que nos representa como país y que indica nacionalidad, fue izada por primera vez el día 27 de febrero de 1812, en el entonces pueblo de Rosario (hoy ciudad de Rosario) a orillas del río Paraná. Esta bandera creada, por Don Manuel, fue adoptada como símbolo patrio de las Provincias Unidas del Río de la Plata recién el 20 de julio de 1816, en el que fuera Congreso General Constituyente de San Miguel de Tucumán. En Argentina, y como conmemoración del prócer muerto en 1820, se adoptó oficialmente el 20 de junio como “Día de la Bandera”, el día del fallecimiento de Manuel Belgrano.
Pero resulta ser, cosas de la Argentina, que hasta el año 1985, los argentinos tuvimos dos banderas oficiales, una de ellas, que el común de la gente denominaba “Bandera de Guerra”, ostentaba en el centro de la franja blanca el “Sol Incaico”, “Sol de Mayo” o “Sol de Guerra”; la misma era de exclusivo uso por los organismos oficiales y por las fuerzas armadas. La otra de uso civil, o “Bandera civil”, carecía del Sol. A partir de ese año el Congreso Nacional, promulgó la ley 23.208 la cual dispuso que el “Sol de Mayo” debía figurar en todas las banderas argentinas. Manuel Belgrano fue, sin lugar a dudas, uno de los padres de la patria. Y esto es lo que se resume sobre su actuar en vida… “El Pensamiento llevado a la Acción”.

MI BANDERA (Marcha)

“Aquí está la bandera idolatrada,
la enseña que Belgrano nos legó,
cuando triste la Patria esclavizada
con valor sus vínculos rompió.
Aquí está la bandera esplendorosa
que al mundo con sus triunfos admiró,
cuando altiva en la lucha y victoriosa
la cima de los Andes escaló.
Aquí está la bandera que un día
en la batalla tremoló triunfal
y, llena de orgullo y bizarría,
a San Lorenzo se dirigió inmortal.
Aquí está, como el cielo refulgente,
ostentando sublime majestad,
después de haber cruzado el Continente,
exclamando a su paso: ¡Libertad!
¡Libertad! ¡Libertad!”

Letra: Juan Chassaing | Música: Juan Imbroisi

Debido a su tendencia antiespañola, en 1900 su letra fue ligeramente modificada Se cambió el verso «…con España sus vínculos rompió» por «con valor sus vínculos rompió».

Juan Enrique Chassaing fue un abogado, militar, político, periodista y poeta argentino. En 1852, cuando tenía 13 años de edad, ganó un concurso realizado en su escuela, escribiendo la oración “A mi bandera”. En 1906, el clarinetista italiano Juan Imbroísi, que era director de la banda del Séptimo Regimiento de Infantería, la musicalizó como marcha.