A pesar que ambos llegaban invictos, Bahía blanca fue demoledor y aplastó a Zárate-Campana por 75 a 36. Y así se consagró campeón de manera anticipada.
Se sabía que iba a ser un rival muy duro, quizás imposible de ganarle. Pero de ahí, a la demoledora derrota que tuvo Zárate-Campana en la cuarta fecha del Provincia, había un largo tramo. La verdad que Bahía Blanca no sólo ratificó que era por lejos el mejor de la competencia, mostrando todo su potencial ante un Zárate-Campana que tuvo un cotejo para el olvido y lo terminó pagando muy caro. Aunque ambos llegaron a ese partido de manera invicta con tres triunfos consecutivos, esa paridad numérica, no se reflejó dentro de la cancha. Es que el elenco de Juan Negro fue altamente superado desde el primer cuarto.Tal es así, que Bahía metió un rápido parcial de 23-9, que terminó siendo determinante. Si bien el segundo cuarto fue más parejo, Zárate-Campana no encontró nunca respuestas para ponerse en juego. Es más, Bahía fue ampliando su ventaja con cada minuto que pasaba (se fue al entretiempo ganando por 20). A pesar del 36-16 a su favor, Bahía no bajó el pie del acelerador en el complemento, dejando en claro que el título ya estaba en su mano de manera anticipada. Finalmente fue un duro 75 a 36, para un Zárate-Campana que no tuvo ni lugar para ilusionarse con pelear el partido y el título. Mañana cerrará su participación con Mar del Plata, para ver su puede finalizar segundo.
