Por Eduardo Rivas – La ley 13.163 (https://normas.gba.gob.ar/documentos/VNRNbtMV.html) creó el Fondo de Fortalecimiento de Programas Sociales, luego devenido en el Fondo de Fortalecimiento de Programas Sociales y Saneamiento Ambiental, por el que los Municipios pueden nutrirse de recursos para la atención de los servicios de Asistencia Social. De hecho, el reparto del 80% de estos fondos, a nivel provincial, está determinados ‘de acuerdo a un índice de vulnerabilidad social en cuya composición deberá contemplarse de manera relevante la cantidad de población bajo la línea de indigencia para cada caso’.
Es una medida cuestionable puesto que la ayuda queda al arbitrio de las autoridades que, como el César, tienen el poder absoluto para dar o no, y de tal forma poder conseguir cosas a cambio.
Zárate recurre seguido a esta herramienta a fin de poder brindar pequeñas ayudas a vecinos del Distrito que deben afrontar difíciles situaciones económicas, y en general se trata de montos reducidos en comparación, por ejemplo, a lo que cobra un Secretario del Municipio o el propio Intendente Municipal.
Decimos en general porque no siempre es así, y las decisiones que toman los funcionarios municipales no son lo suficientemente claras como para que el proceso de ayuda social sea lo suficientemente claro como la situación amerita.
El pasado 1 de junio de 2020 el Secretario de Desarrollo Humano Darío Raffo y el Intendente Municipal Osvaldo Cáffaro firmaron el Decreto 337, por el que deciden atender el pedido de la Subsecretaria de Inclusión Social y Abordajes Integrales para el otorgamiento de un subsidio dentro del marco de la Ley 13.163.
Argumentan las autoridades, en los considerandos del decreto, que ‘la solicitante no tiene ingresos suficientes para satisfacer las necesidades básicas del grupo familiar; Que, de acuerdo al Informe Socio-Económico que corre agregado al expediente, la requirente, pertenece al sector carenciado de nuestra ciudad; [y] Que, por lo expuesto precedentemente corresponde acceder a lo peticionado’.
¿Quién es la requirente? Florencia Dávalos, cantante, conocida por ser la hija del poeta salteño, y residente durante algunos años en nuestro Distrito, Jaime Dávalos.
Y el Decreto trae aparejadas una serie de dudas que sería oportuno se pudieran disipar a través de la exposición pública del Expediente N’ 4121-1853/2020 sustanciado para la tramitación del subsidio, como por ejemplo si la citada Dávalos es residente en el Distrito, puesto que según el último padrón electoral vota en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Cuál es la evaluación para determinar que, efectivamente, Dávalos pertenece ‘al sector carenciado de nuestra ciudad’ y que por ende no puede ‘satisfacer las necesidades básicas del grupo familiar’, puesto que siendo una figura pública nunca hubo un atisbo de sospecha que esto pudiera ser así, puesto que, por ejemplo, está inscripta ante AFIP como monotributista, aunque tiene dos empleadores en el último año.
Asimismo cuál es la razón por la que el monto por el que se le asigna el subsidio supera largamente los subsidios entregados por el Municipio en base a este Fondo.
¿Son reales las causas que se esgrimen en el Decreto o en realidad lo que hubo fue un desvío de dinero, malversación de fondos públicos, para causas no difundidas en favor de Florencia Dávalos?
¿Era esta una prioridad? ¿En serio era prioritario darle a Dávalos el equivalente a más de 12 bonos COVID entregados al personal de salud que luchaban contra la pandemia mientras Raffo y Cáffaro subsidiaban a Dávalos?
Consultada Florencia Dávalos su respuesta fue ‘para que no quede ninguna duda, no he recibido ningún subsidio de la Municipalidad de Zárate en junio de 2020, como Ud. refiere. Si Ud. tiene una información diferente, por favor, muéstreme el Informe Socio-Económico y expediente que confirme tal afirmación de su parte. Para su información, el sector de la música al cual pertenezco fue severamente golpeado por la pandemia. Pero por fortuna, he logrado subsistir gracias a mi trabajo dando clases de manera privada y también en instituciones para las cuales trabajo hace varios años. No he recibido ningún subsidio ni de Municipalidad ni del Gobierno Nacional’.
Seguro habrá una explicación de los gobernantes, los vecinos la merecemos.
