Estuvimos conversando con una amigo, el ex vecino de Escobar y ex director de EL DIARIO de la vecina ciudad, que ahora sin dejar de mantener su vocación de comunicador en www.elnuevodigital.com.ar también radicado en Salvador de Bahía, en la Isla Itaparica, lleva adelante un emprendimiento llamado CORUJA BRANCA y en pandemia tiene novedades para compartir en ambos sentidos y lo hizo en radio EL DEBATE. 

LA POSADA ORIGINAL QUE AHORA CRECERA A MAS DEL DOBLE DE ESPACIO, CAPACIDAD Y SERVICIO.

Nos contó Carlos Maipah, el director del medio digital de la Ciudad de Escobar, lo que está haciendo en la pandemia a más de 4000 km de Escobar, allá en la hermosa isla de Itaparica. “Mirá, al lado de Coruja Branca, donde era mi casa la que ahora con todo el terreno, se ha integrado con sus 1800 metros cuadrados a la estructura de lo que será la nueva Posada, ahí estamos construyendo 8 suites para matrimonio poniendo una piscina, un mini gimnasio, todo con hidromasajes”.

Carlos también nos contó que en el sector “agregado” construyen dos bares temáticos y también un restaurante italiano además de una cantina típica de comidas bahianas”, explicó así como se “distrae en plena cuarentena” y agregó “además, le estamos haciendo algunos locales comerciales chicos, como si fuera una galería, así que está quedando lindo el lugar y esta irreconocible”, anticipó.

LA OBRA QUE NO SE DETIENE EN LA PANDEMIA.

La posada “La Coruja” ampliará de esta manera su servicio y nos cuenta que “En total ahora ampliaremos la cantidad de camas, voy a tener 64 -adelanta- si tuviera todo habilitado y todas las camas ocupadas tal como está planificado, vendrían 64 personas y todos estarían cada uno en su cama más algún par de cunas para bebes”, disparó.

El crecimiento del emprendimiento también generará mas cantidad de puestos de trabajo cuenta con orgullo. “Esto genera mayor cantidad de trabajo ósea, más cantidad de personal…” y con orgullo describe como será su restaurant italiano que “solo funcionará a la noche, será un lugar más para una cena más fina, ahí el servicio va a incluir la entrada, más la cena y postre, todo incluido, y será con reserva -describe- ya que solo tiene una capacidad de 20 personas, porque siempre debemos tener en cuenta que tenemos que respetar las normas del protocólogo de seguridad, a partir de esta pandemia” explica.

BASTA CON ABRIR UN PUERTE Y ENFRENTARSE A LA PLAYA Y EL MAR INMENSO BRASILERO.

Luego nos detuvimos a saber como viven allá el coronavirus y sus implicancias “Acá en la isla, se restringieron los servicios de ferry, también los de lancha y recién el sábado y domingo (este fin de semana) van a ser los dos primeros días que va a ver lanchas y ferris -dice, desde que se inició la cuarentena-, pero la gente más o menos obedece todo el tema de la pandemia”, relata.

Y amplía Maipah sin poder abstraerse de su condición de viejo periodista “Acá estuvo tranquilo todo lo de la pandemia y la verdad que gracias a Dios hemos sido privilegiados, porque en Brasil en los dos únicos lados que estuvo fuerte y hubo contagios fue en la zona de Rio De Janeiro y San Pablo principalmente, porque es complicado mantener en control a todo ese montón de gente”, dice argumentando que allá son “veinte palos de personas”.

ESTA SERÁ LA BARRACA (RESTAURANTE DEL PESCADOR)
EL PROPIO MAIPAH, Y SU OBRA: EL VITRÓ

Tiene su mirada económica para dejarnos al final de la charla con su amigo y colega Daniel Vogel “Yo creo que la economía se va a resentir en la isla, porque va haber muchísima menos cantidad de gente (turistas) y en ese sentido si se va a notar.”, anticipa por la próxima temporada.

Despidiéndose nos describe su lugar en el mundo y cuenta que, en Itaparica “El impacto de la cuarentena va estar, lo que te quiero decir que no será ese caos de las grandes urbes, donde el tipo quedó en la calle….”  dice lamentándose y entonces nos hace llenarnos de envidia cuando le preguntamos como la vive en persona, “Mirá, acá mi forma de vida con cuarentena o sin cuarentena, no me afecta yo estoy re bien, no hay ninguna diferencia porque yo estoy en una isla” y describe el paraíso que disfruta con un mar azul con arenas limpias, con coqueros, peces de muchas variedades, conviviendo con los monitos “que ya ahora se sientan a comer a mi mesa” cuenta con plenitud de disfrute el vecino escobarense que, mientras a distancia sigue dirigiendo su medio digital, sueña en el sitio donde encontró su lugar en el mundo, cómo atender mucho mejor a lo cientos de argentinos y ya también, a los muchos zarateños que viajaron, y como hacer para desvivirse en cordialidad y atención para que pases “las menores vacaciones que puedas imaginar”.

PLAYA ESXCLUSIVA DE “LA CORUJA BRANCA” DONDE CARLOS PASA LA CUARENTENA.