Que no pase desapercibido: alertan sobre productos químicos usados en los cosméticos

Algunos artículos tienen sustancias que son nocivas para la piel y el cuero; cremas, lociones y champús, entre otros productos cosméticos, pueden estar elaborados con sustancias químicas que tornan peligroso su uso por los daños que causan principalmente en la piel y el cuero cabelludo, según alertaron especialistas.

El caso más conocido es el del formol, empleado en alisadores de cabello y que entre otros trastornos frecuentemente advertidos por las autoridades de salud figuran cuadros alérgicos, irritación ocular, enrojecimiento, lagrimeo y dermatitis.

El empleo del formol aceptado por la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) es solo como conservador y endurecedor de uñas a concentraciones limitadas, no para alisadores de cabello.


 

“Al adquirir un cosmético, siempre se debe consultar su rótulo, en el que encontrarán ciertos datos, que en caso de que no estén presentes, podría revelar que se trata de un producto no autorizado”, advirtió María Belén Bazante, directora técnica de Natura Sibérica Argentina, una empresa dedicada a la producción de productos naturales de belleza en base a hierbas cultivadas en granjas orgánicas.

Resaltó que “el listado de ingredientes y el modo de uso son algunas de las indicaciones que deben verificarse antes de la compra para estar tranquilos que se trata de productos aprobados y seguros”.

Algunos elementos a evitar son los aceites minerales, la parafina y la vaselina, por tratarse de derivados del petróleo que, por resultar económicos, se utilizan para crear una capa impermeable en la piel que da un aspecto de suavidad y tersura.


Champús: sin sulfatos, siliconas ni parabenos

En cuanto a los champús, se recomienda evitar los elaborados con sulfatos, siliconas y parabenos. El primero de esos componentes, presente en muchos productos de venta habitual en supermercados y perfumerías, genera mucha espuma, asociada por lo general a la limpieza pero que deja muy reseco el cabello y el cuero cabelludo ya que también remueve los aceites naturales.

La nueva tendencia en el mercado son los champús Low Poo, que no contienen sulfatos y de ese modo disminuyen las probabilidades de irritación en el cuero cabelludo.

Los sulfatos producen sequedad, picazón y caspa; el cabello se vuelve poco manejable e incluso la piel se puede volver muy grasa al tratar de compensar la pérdida de sus aceites naturales.

Los especialistas recomiendan productos naturales, libres de sulfatos, que limpien suavemente el cabello sin eliminar la humedad, y de ese modo ayuden a reducir la ruptura y desprendimiento.

Para poder verificar la composición del producto a adquirir hay que tener en cuenta que los nombres de los sulfatos más utilizados son Lauril Sulfato de Sodio (SDS) y Lauret Sulfato de Sodio (SLS), mientras que los de las siliconas son: Dimeticona, Cetildimeticona, Feniltrimeticona, Estearildimeticona, Ciclometicona, y Ciclotertrasiloxano.

Para los especialistas, es conveniente utilizar productos de belleza cosmética que no contengan parabenos, siliconas ni sulfatos (SLS) y señalan que para poder confirmar que no tengan este tipo de sustancias, el producto debe llevar el sello de ICEA que avala, entre otras cosas, que no poseen sustancias nocivas.