Hay unos 463 millones de adultos con la enfermedad en el mundo. En Argentina, más de 1 de cada 10 mayores de 18 la padece, cifra que crece año a año.
Crónica e invisible -porque no siempre da síntomas-, la diabetes es una enfermedad cuya prevalencia crece año a año en la Argentina y en el mundo, fundamentalmente la tipo 2, asociada al estilo de vida sedentario y con mala alimentación.
En el marco del Día Mundial de esta enfermedad, que se conmemora este sábado 14 de noviembre, la Federación Argentina de Diabetes (FAD) organiza en forma virtual su congreso para pacientes y propone como eje central la prevención.
En el último Atlas de Diabetes de la Federación Internacional de Diabetes se advierte que esta enfermedad afecta a unos 463 millones de personas de entre 20 y 79 años y que para el 2045 la cifra trepará a 700 millones. En la Argentina, la diabetes pasó de afectar al 9,8% de la población en 2013 al 12,7% en 2018, que son los datos más actuales.
La buena noticia es que una vida saludable, con alimentación equilibrada y la realización de actividad física regular, pueden prevenir su aparición un 60% de las veces.
“Se calcula que cerca de 4 millones y medio de argentinos tienen diabetes y que la mitad no lo sabe. Del total, casi el 90% tiene diabetes tipo 2, una variante en general de la adultez, pero que está viéndose cada vez con más frecuencia en niños y adolescentes, asociada al sobrepeso y al estilo de vida sedentario”, señaló Gabriel Lijteroff, director del Comité Científico de la FAD.
Por su parte, Judit Laufer, profesora y presidenta de esta institución, señaló que los hábitos y una vida saludable pueden contribuir enormemente a la prevención de la diabetes tipo 2: “Hay muchos factores que intervienen en los hábitos, desde lo económico, lo social, las costumbres familiares e inclusive la negación de la enfermedad”.
En la Argentina, 6 de cada 10 mayores de 18 años tienen sobrepeso u obesidad, que son factor de riesgo clave para el desarrollo de diabetes tipo 2.
“9 de cada 10 personas con diabetes tipo 2 tienen sobrepeso u obesidad, por eso es tan necesario tratar en simultáneo la diabetes y el exceso de peso. Para llevar adelante -y sostener en el tiempo- una alimentación saludable, es pertinente incorporar los cambios gradualmente”, indicó Marcela De La Plaza, médica especialista en Nutrición y Diabetes y vicepresidenta de la FAD.
Principales recomendaciones
- Comer cuatro veces al día
- Beber agua, soda o líquidos sin azúcar
- Consumir frutas e incluir variedad de verduras en los menús
- Carne roja o pollo en una de las dos comidas principales
- Incorporar legumbres y semillas
- Elegir lácteos descremados
- Incluir pescados ricos en grasa omega 3 (sardinas, caballa, jurel, atún)
“Es importante consultar con un profesional que individualice recomendaciones a los gustos, horarios y posibilidades reales de cada uno, para que perduren en el tiempo. La persona no debe ‘hacer dieta’, sino cambiar hábitos, aprender a moderar porciones, combinar alimentos, incorporar verduras de todos los colores y beber más líquido”, señaló De La Plaza.
Diabetes y Covid-19
Si bien no existe demasiada información aún, en la FAD reconocen que es un tema de elevadísimo interés. De hecho, la estadística nacional e internacional muestra que casi el 30% de la mortalidad por Covid-19 en menores de 60 años se dio en personas con diabetes, por lo que este grupo debe tomar recaudos especiales.
Independientemente de todas las medidas para la población general, la FAD recomienda a los pacientes procurar contar con toda la medicación necesaria para el tratamiento y cuidado de la diabetes: tener consigo alimentos azucarados que permitan poder actuar ante una hipoglucemia de emergencia y estar en contacto con su equipo de salud para saber en qué circunstancias tiene que consultar a un hospital.
Hasta el momento, la evidencia muestra que hay una acción directa del virus sobre el páncreas. “También se están viendo debuts de diabetes en el contexto de Covid-19, es decir, personas que desarrollan diabetes tras infectarse con el virus. Aún no sabemos si esa diabetes remitirá o no, es algo que iremos viendo en el tiempo”, concluyó Lijteroff.