En este sábado, Zárate palpita ya lo que dentro de 24 horas será la primera gran final para el ascenso al Nacional B para el club Defensores Unidos, el primero de la localidad en llegar a esa instancia crucial para las aspiraciones de un club futbolero como es CADU. “Vamos por lo que queda”, como dijo Javier Velázquez el capitán y goleador. Visitando la cancha, descubrimos que vamos con un “doble partido de Ida”.
El viernes este multimedio EL DEBATE recorrió el estadio. Vimos caras de ansiedad, de expectativa, de emoción para que llegue el gran partido “de ida” contra San Carlos en el gigante de Villa Fox, el Mario “León” Losinno. Y ¿vos crees que lo lograremos? es la pregunta. Falta solo un esfuerzo más… así se ilusiona la ciudad y es lógico, ya que el máximo referente del Celeste dijo “Con esto -clasificar finalista- no alcanza, vamos por lo que falta” y todo el pueblo se ilusiona.
Vimos gente sentada en la tribuna y mirando hacia la cancha donde en horas saltarán los once en la “Ida” en la primera finalísima, vimos hinchas en la puerta haciendo cola para comprar la entrada para este domingo enfrentar en “el partido de ida” a villa San Carlos en la búsqueda de esa plaza de ascenso a la segunda categoría del fútbol de AFA.
Pero en este partido de Ida, hay una historia de otra Ida.
¿Qué se esconde detrás de la nueva tribuna por ahora identificada como Sáenz Peña que el club Defensores inaugurará este domingo habilitada en este encuentro solo para una tercera parte de hinchas, ya que la misma tiene capacidad para más de 3000 personas pero solo podrán alojarse mañana domingo en “el partido de Ida” 1200 a 1300 personas.
Mientras recorríamos el lugar y sacábamos las fotografías que te mostramos en la nota nos encontramos con Germán Cano, el dueño de la Herrería “El yunque de Ida” y mientras corrían para poner los últimos para avalanchas supimos que no es solamente el dueño titular de esta herrería de la ciudad de Zárate a la que la Comisión Directiva le encargó la difícil tarea de hacer en 5 días toda la seguridad de las barandas laterales, barandas de frente con sus respectivas protecciones, las barandas en las bocas de los dos accesos a las tribunas y los para avalanchas.
Germán nos describe su propia historia de vida, “el Yunque de Ida” fue consultado por las tareas de herrería contra reloj que había que hacer. “El domingo a las 18 me llamaron… presupuesté nuestro trabajo y fue aprobado el mismo domingo a las 23:00”.
Entonces empezó una maquinaria humana compuesta por un quinteto, todos fanáticos de CADU a cortar, soldar, nivelar, embutir, fijar, etc. para completar la obra y que este domingo en el partido “de ida”, el más importante en toda la historia del Celeste, la tribuna que da espaldas a la calle Sáenz Peña aloje simpatizantes.
Nos dijo Germán “desde el domingo a la noche empezamos a proyectar el trabajo, el lunes arrancamos con mi hermano, un vecino y un par de amigos a full 12 a 13 horas diarias para llegar a terminar hoy viernes a la noche el trabajo que concluirá con el pintado de blanco a los para avalanchas, pero la pintura la hace la gente del club” nos aclara.
Se emociona por la obra hecha. Deja saber qué tiene claro desde pequeñito, que por tener la herrería tan cerca, en la calle San Lorenzo 211 “esta cancha es casi el patio de mi casa. ¡¡¡Y no dudé en aceptar con un sí!!!” cuando la Comisión Directiva le dijo no hay plata hasta después del partido, y con los ojos vidriosos nos relató la historia de “Ida y su Yunque”.
IDA es su abuela, la que le regaló el Yunque.
Relata Cano, que a los 12 años se hizo herrero y que su abuela le regaló el yunque que era de su padre (bisabuelo de Germán), un checoslovaco soñador que vino a Zárate hace más de 100 años a “Hacer la América”.
Hoy, IDA y Germán fueron protagonistas con “EL Yunque” de la terminación de toda la seguridad para que este domingo se inaugure la tribuna, la que le dará la envoltura perfecta al mejor partido de la historia de Defensores, el que hay que ganar y por muchos goles.
¿Qué nombre le pondrías a la tribuna Germán?, le preguntamos, pensó y nos dijo “Martín – Javier” afirmó el herrero zarateño muy emocionado, sabiendo íntimamente y por todos sus días, que dejó escrito su nombre, el de sus colaboradores y principalmente el de su abuela IDA en la obra final antes del gran partido “yo le pondría así, porque los conozco a los dos desde chicos en Zárate y lo haría con sus nombres sin apellidos por toda esta alegría que nos dieron…”.
