Descubren el segundo exoplaneta más cercano a la Tierra: Barnard b

El planeta rocoso probablemente está congelado, es tres veces mayor que la Tierra, y se ha detectado a una distancia de 6 años luz orbitando a su estrella madre, una enana roja.

Un equipo de astrónomos ha descubierto un exoplaneta en órbita alrededor de una de las estrellas más cercanas al Sol: la estrella de Barnard.

A aproximadamente 6 años luz de distancia, es el segundo sistema estelar más cercano (el primero es Alfa Centauri). Es un tipo de estrella débil y de poca masa, una enana roja que, por otra parte, se considera uno de los mejores lugares para buscar candidatos a exoplanetas, pese a que nuestro Sol es una estrella de tamaño mediano.


Se trata de un planeta potencialmente rocoso. Es decir, todavía no se ha probado cuál es su composición exacta, pero lo más probable es que se trate de una súper-Tierra, con una masa al menos 3,2 veces superior a la de la Tierra.


 

El año en esta roca dura 233 días, o dicho de otra manera, ese es el tiempo que tarda en orbitar a su estrella.

Los resultados, publicados en la prestigiosa revista Nature, muestran que el planeta se sitúa en una región de la órbita conocida como ‘snow line’ (línea de nieve), área mucho más lejana a la zona de habitabilidad de su estrella, por lo que no puede existir agua líquida ni tampoco la vida, tal y como la conocemos.

Un método innovador de detección de exoplanetas: oscilaciones en las estrellas

Los investigadores utilizaron el método de velocidad radial durante las observaciones que llevaron al descubrimiento de Barnard b. Esta técnica detecta oscilaciones en una estrella probablemente causadas por la atracción gravitatoria de un planeta en su órbita. De hecho, el estudio es innovador no solo en su descubrimiento, sino en su método, dado que esta es la primera vez que se utiliza esta técnica para detectar un planeta tan pequeño y a su vez tan lejos de su estrella anfitriona.


Estas oscilaciones afectan la luz que viene de la estrella de la siguiente manera: a medida que la estrella se mueve hacia la Tierra, su espectro aparece ligeramente desplazado hacia el azul y, a medida que se aleja, se desplaza hacia el rojo.


 

Los investigadores examinaron los datos de archivo obtenidos durante un período de 20 años y además añadieron nuevas observaciones procedentes de la última generación de instrumentos, como el espectrómetro Cármenes, en España.

Gracias a toda esta rica fuente de datos, los científicos obtuvieron la precisión exacta para identificar la presencia del planeta.

Fuente: Muy Interesante