La yerba mate es rica en antioxidantes, vitaminas del grupo B y C y minerales como potasio, magnesio y hierro. Sin embargo, su consumo excesivo puede ocasionar efectos adversos como deshidratación, insomnio o irritación gástrica.
Cada 30 de noviembre, Argentina celebra el Día Nacional del Mate, una fecha dedicada a honrar esta emblemática infusión que forma parte de la identidad cultural del país. Este día se instituyó en homenaje al caudillo Andrés Guacurarí, conocido como “Andresito”, quien promovió el cultivo de la yerba mate en Misiones durante el siglo XIX. Con un legado que trasciende generaciones, el mate no solo es una tradición sino también un símbolo de historia, que promueve la unión y la amistad.
Ya sea, amargo, dulce, caliente o en tereré, el mate es mucho más que una bebida; también es un aliado para la salud. “Su bajo contenido calórico y de sodio lo convierte en una opción ideal para quienes buscan una dieta equilibrada. Actúa como un poderoso diurético y antioxidante natural que ayuda a combatir la retención de líquidos y el estreñimiento. Es fuente de vitaminas del grupo B, esenciales para el funcionamiento del organismo, vitaminas C que ayudan al sistema inmunológico y de minerales como potasio, calcio y hierro. Asimismo, sus xantinas estimulan el sistema nervioso central, mejorando la concentración y los niveles de energía. Además , destaca por su función saciante, siendo inhibidor del apetito.” resaltó Ana Alvarez Tartaglia, Licenciada en Nutrición de Boreal Salud (MP 1316).
Sin embargo, la especialista comparte algunas desventajas claves que deben ser consideradas:
- Su efecto diurético puede llevar a deshidratación si se consume en exceso
- Beberlo a temperaturas muy altas puede dañar la mucosa de la boca y faringe
- En exceso, puede provocar insomnio, ansiedad y palpitaciones debido a su contenido de cafeína.
- Puede reducir la absorción de hierro, afectando a personas con anemia.
- Puede causar irritación gástrica en personas con gastritis u otras afecciones digestivas.
El consumo excesivo de mate puede desencadenar diversos efectos secundarios, por lo que es fundamental identificar cuándo se alcanza este límite. Si se combina con otros estimulantes, como café o té, la cantidad tolerable de mate disminuye significativamente. Algunos signos de consumo excesivo incluyen problemas para dormir, sensación de nerviosismo, molestias digestivas y palpitaciones. Por ello, es esencial escuchar al cuerpo y ajustar la cantidad de mate para evitar complicaciones.
“Cabe recalcar que, existen grupos de población que deben limitar o evitar su ingesta. Las mujeres embarazadas y lactantes pueden consumir mate, pero con moderación, debido a su contenido de cafeína. Las personas con anemia deben evitarlo durante las comidas para no interferir con la absorción de hierro. Aquellos con gastritis u otras afecciones digestivas deben abstenerse, ya que puede agravar los síntomas. Asimismo, quienes toman medicación para enfermedades como depresión o Parkinson podrían experimentar interacciones adversas.” agregaron desde Boreal Salud.
El consumo moderado de mate es clave para disfrutar de sus beneficios sin comprometer la salud. No existe una cantidad única que funcione para todos, ya que factores como el estado de salud, la tolerancia a la cafeína y los hábitos alimenticios influyen en esta recomendación. Mantener una hidratación adecuada con agua y evitar reemplazarla por mate es fundamental. Si se presentan síntomas como insomnio o ansiedad, es señal de que se debe reducir la cantidad. No obstante, en equilibrio, el mate sigue siendo una tradición saludable y representativa de la cultura argentina.