Uno de cada diez jóvenes de entre 12 y 18 años toma alcohol a diario, y casi el 50% reconoce que en su entorno hay una persona que tiene problemas con las bebidas. Los datos preocupantes se desprenden de un relevamiento realizado en La Plata y Gran La Plata por la Defensoría del Pueblo bonaerense.
La medición tomó como referencia unos 632 casos en establecimientos educativos de la zona de la capital provincial. “Es un informe cuantitativo, aleatorio, que lo realizamos en forma voluntaria y anónima”, le explicó a DIB el Defensor Adjunto, Walter Martello.
“Respecto a la edad de inicio en el consumo, la información obtenida indica que el 89% de los individuos de la muestra declara haber tenido su primera experiencia de consumo de alcohol entre los 12 y 15 años de edad. En nuestros resultados 1 de cada 5 niños se inicia en el consumo de alcohol a los 12 años de edad (20,2% de la muestra)”, explica el trabajo.
En tanto, en lo que refiere a la frecuencia del consumo, “un dato preocupante es que un 11,4% de los individuos declara consumir a diario o durante la semana”. “Seguidamente, un 25,5% manifiesta consumir los fines de semana en un contexto de diversión y nocturnidad. Un porcentaje de 41,9% manifiesta un consumo esporádico u ocasional. Y un 20,9% manifiesta no ingerir ningún tipo de bebida alcohólica”, agrega el informe.
El relevamiento señala también que el 45% de los chicos buscan “divertirse” a la hora de tomar y el 36% lo hacen solo porque les gusta el sabor de las bebidas. Mientras, un 7,4% intenta “desinhibirse” y un 1,6% “gustar a los demás”.
El trabajo también advierte que la mayoría de los chicos (el 77%) dice haber recibido información “sobre las consecuencias físicas que produce en el organismo el consumo de sustancias psicoestimulantes”. Sin embargo, también aseguran que tienen un fácil acceso al alcohol: el 26% lo consigue en su propio hogar y el 29,8% lo compra en comercios.
“En referencia al consumo de bebidas energizantes y su coingesta con alcohol, el 45,1% de la población estudiada declara consumir energizantes y mezclarlos con alcohol. En virtud a su carácter de productos de venta libre acceden a los energizantes adquiriéndolos en kioscos (52,9%) supermercados (40,3%) y en boliches (6,6%) en éste último caso se está infringiendo la prohibición establecida por el artículo 5° de la Ley N° 14.050”, explica Defensoría.
Familiares con problemas de consumo
Un 47,7% de los encuestados dijo conocer a una persona que presenta problemas con el alcohol. En la mitad de los casos el adicto es un familiar. El 29,8% son amigos y el 17,7% habla de un vecino.
La lista de familiares con problemas de consumo de alcohol la encabezan los tíos (13%), seguidos por los hermanos (12,1%), padres (11,1%), primos (5,8%), madres (5,5%) y abuelos (4,6%). El informe detalla: el 28,7% corresponde “a miembros de lo que podemos denominar el grupo familiar consanguíneo en primero y segundo grado” y el 23,4% “al grupo familiar consanguíneo en tercer y cuarto grado”.
Por otro lado, al imaginar un problema propio de consumo de alcohol, casi el 54,4% de la población estudiada, 1 de cada 2 chicos, declaro que “acudiría a sus padres en busca de ayuda, es decir, recurriría al núcleo familiar”.
El relevamiento, del que también participó la Universidad Nacional de La Plata, fue presentado hoy en el Círculo de Periodistas de la capital bonaerense.
(DIB)