El terrible momento que atraviesa el exsenador de Juntos por el Cambio (JxC), Esteban Bullrich, internado en terapia intensiva en el Hospital Austral por una crisis respiratoria derivada de su cuadro de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), sumó un nuevo parte médico este sábado, en el que se señala que los médicos han empezado a bajarle la sedación, para ver la evolución del cuadro.

El antiguo senador permanecía “estable, bajo sedación, con ventilación mecánica” y continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos, según el último parte médico difundido en la tarde del jueves. “El paciente Esteban Bullrich continúa ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario Austral, estable, bajo sedación, con ventilación mecánica y en tratamiento por una neumonía”, precisaba el parte difundido 1° de septiembre.

Sin embargo, dos días después, los médicos informaron que comenzaron el proceso de “disminución de sedación” y que el referente de la oposición tiene “posibilidad de interacción con sus familiares”.

En el comunicado de la institución se informó, además, que “la familia agradece por tantas demostraciones de cariño y continúa pidiendo que los acompañen con sus oraciones” y agrega un mensaje de la esposa de Bullrich. “En nombre es Estaban que tanto ama a su país, y confiando en el amor de Dios, ofrecemos este momento a nuestra querida Argentina”.


El comunicado del Hospital Austral, sobre el estado de Esteban Bullrich este sábado 3 de septiembre.


La ELA y el diagnóstico de Bullrich

Esteban Bullrich fue diagnosticado en abril de 2021 con ELA, una enfermedad que afecta al sistema nervioso central y provoca la rigidez y pérdida del control muscular.

En un primer momento, el exsenador experimentó dificultad para hablar, pero la enfermedad avanzó rápidamente y afectó sus movimientos físicos, razón por la cual debe movilizarse en silla de ruedas y se vio obligado a renunciar a su banca en el Senado.

Esteban Bullrich y su desgarrador mensaje antes de ser internado: “Rezo porque estoy indefenso”

Debido a que no hay una cura para la ELA, Bullrich inició una campaña para fomentar los estudios en esta área y poder encontrar un tratamiento efectivo que logre poner fin al avance de este tipo de esclerosis.

Lamentablemente, los cuadros comienzan a agravarse cada vez más hasta afectar los músculos respiratorios y el corazón, provocando la muerte del paciente.


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