Por Daniel A. Vogel – Buen día, buen domingo para todos; en éste que es el primero del noveno mes, cuando comenzamos a ver cerquita la estación más linda de todas, la primavera; tenemos una jornada teñida por mucho viento y con anuncio de agua.
Pero, vamos a disfrutar a pleno de este domingo. Poniendo muchos sayos, a los que les quepan.
En esta columna dominical, lo haremos de una manera muy particular, porque vamos a compartir con ustedes algunas reflexiones que elegimos, de esas que vienen en los viejos almanaques que se le arranca una hojita por jornada y detrás traen frases brillantes y destacadas que seguramente, nos servirán para pensar individualmente en éste momento tan particular que vivimos todos los argentinos.
El primero que les voy a compartir es de Merlín de Doval qué dice “cuando un hombre ha llegado a un punto tal de corrupción que no tiene aún la conciencia de su perversidad, no se puede contar ya con él”. Primer “al que le quepa el sayo…”
Vamos con el segundo. En este caso la frase corresponde a San Agustín quién dijo “errar es humano, perseverar en los errores es diabólico” póngale según su propia interpretación, el sayo…
Ahora, vamos con dos que no tienen autoría. Ellos corresponden a nadie, son expresiones de algún anónimo que se inspiró y dijo “no aceptes la infamia, la mediocridad, la envidia y la bajeza. ¡No te conformes con poco, exige lo tuyo!… Y llegarás al mundo de la humilde excelencia” ¿brillante no? Que alguien, se vaya poniendo el sayo, si le cabe…
Y amigos, por último, les comparto otro de otro autor anónimo que dice: “con fe una muralla es una telaraña, sin fe una telaraña es una muralla” y ahí, también le cabe el sayo, pero ahora para todos.
Porque, pensando juntos y gracias a estas hojas caídas del almanaque 2023 con estos valiosos pensamientos, los que bien podemos acomodarlos para que, nos quepan a todos por estos días y estos tiempos, que vivimos los argentinos.
Son tiempos de no hablar mucho.
Son tiempos de escuchar mucho.
Son tiempos de pensar mucho.
Son tiempos donde, tenemos mucho por decidir.
Son tiempos donde nuestro pensamiento vale mucho.
Es entonces el momento de tener fe, de ser muy inteligentes, de aceptar lo bueno y rechazar lo malo. Seguramente, para cada uno en su intimidad, estos pensamientos les servirán para discernir específicamente estas cuestiones, la fe, la inteligencia, lo bueno y lo malo.
Empecemos a pensar seriamente que dentro de poco más de un mes, elegiremos no solo el presente, sino también el futuro para nuestra descendencia.
Que tengamos un buen domingo y hoy más que nunca, digamos juntos:
AL QUE LE QUEPA EL SAYO…
