Cuando se toma la decisión de adoptar un perro, normalmente se piensa en elegir a un cachorro para poder adiestrarlo y lograr que se comporte de la manera que uno quiere. Pero muchas veces este proceso tarda años. Alicia Barreto, médica veterinaria y fundadora del refugio APRANI, explica que darle adoptar a un perro adulto, no sólo es dar una nueva oportunidad de ser querido por una familia sino que también su etapa de adaptación y aprendizaje de normas del hogar es mucho más corta.

Expresa la especialista de APRANI: “Al adoptar un perro adulto, encontraremos al compañero más fiel, leal y noble que jamás hayamos imaginado. Le daremos la gran oportunidad de pasar el resto de su vida en una familia y tendremos la gran ventaja de poder salvar la vida de otro, y darle a nuestro compañero los mejores años de su vida gracias a nuestra loable acción de adoptar”

Desde APRANI, Alicia enumera algunos motivos positivos de la adopción de un perro adulto:

  1. Sabemos perfectamente el carácter del perro, en la mayoría de los casos ya contamos con algún antecedente sobre su salud y carácter.
  2. Sabemos su estatura y tamaño definitivo, sin llevarnos sorpresas más adelante.
  3. Ya han madurado y asimilan con más rapidez todo lo que se les enseña en el proceso de su educación. La adaptación de los perros adultos adoptados, (de un año en adelante), es muy rápida y fácil.
  4. El perro se adapta rápidamente a su nueva vida y adquiere en poco tiempo las costumbres de su nuevo hogar, así como las normas de disciplina básicas, como hacer las necesidades en la calle, por ejemplo.
  5. El aprendizaje del perro va ligado al instinto de juego y no pierde dicho instinto hasta muy avanzada edad, por lo que la adopción de un perro nunca deberá supeditarse a los años que tenga; en la adopción debemos guiarnos por el carácter del perro y su adecuación a nuestro estilo de vida.
  6. Los perros adultos normalmente ya han superado la etapa de hacer destrozos en el hogar y han aprendido a controlarse y compartir con su familia una rutina tranquila. Con sacarlos a pasear diariamente y ejercitarlos apropiadamente bastará, no habrá necesidad de calmar ese exceso de energía que caracteriza a los cachorros.
  7. Los cuerpos especiales de seguridad (policía y bomberos) y las organizaciones de invidentes y minusválidos prefieren para el adiestramiento del perro el periodo comprendido entre uno y tres años de edad, por ser la etapa en la que son más receptivos a la disciplina y aprendizaje de conductas. Se trata de entrenamientos especializados: los animales tienen que aprender a realizar su trabajo (rescates, defensa, apoyo a ciegos, etc.) de forma correcta y sin dudas.

“Soy rescatista de animales desde que tengo uso de razón, y encontré el placer enorme que constituye adoptar un perro adulto, o con algún problema de salud tanto física como psíquica. Descubrí su agradecimiento y fidelidad eterna” Cuenta la veterinaria Barreto. “Me sorprendí también con la capacidad de aprendizaje de un perro adulto. Descubrí que poder cambiar para bien el destino de un animal que casi ya no tiene expectativas, me da un placer inmenso y hace que me sienta feliz, realizada.

También descubrí que todas las mañanas me levanto alegre porque voy a poder atenderlo y amarlo, y mis propios problemas personales se diluyen”. Concluye.