La producción de las PyMES industriales bajó 2,5% en marzo aunque el comportamiento de la industria fue muy dispar. “Si bien se cumplieron 18 meses consecutivos en baja, se desaceleró la tasa de caída y hubo cuatro sectores en crecimiento. Compartimos el informe de la Cámara Argentina de la Pequeña Empresa, dado a conocer en el día de la fecha.
Además ascendió a un tercio la proporción de industrias en alza, aunque de la misma manera aumentó también a 49% la cantidad de empresas en baja”, expresó el flamante presidente de CAME, Fabián Tarrío. De ese modo, conviven en la industria Pyme sectores con caídas muy acentuadas con otros que empiezan a recuperarse. Los más golpeados son los que se encuentran más expuestos a la importación, como textiles, calzados y muebles. En cambio, entre los más beneficiados se destacan los que están recibiendo el rebote del agro y la obra pública.
La producción de las Pymes Industriales cayó 2,5% en marzo frente a igual mes del año pasado y subió 12,6% en la comparación con el último febrero (sin desestacionalizar).El tercer mes del año mostró un mejor panorama productivo que en febrero, muy focalizado en unos pocos sectores como material de transporte, productos químicos, metalmecánica y alimentos. En cambio, sectores como calzados, textiles, muebles, maderas, papel, cartón, caucho y plástico, finalizaron con bajas anuales muy profundas.
Los datos surgen de la Encuesta Mensual Industrial realizada por CAME entre 250 industrias Pyme del país. El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) alcanzó un valor de 88,5 puntos en el mes y acumula una caída de 3,2% anual en el primer trimestre del año.
En marzo creció a 32,7% la proporción de industrias con alzas interanuales (de 24,8% en febrero), aunque de la misma manera se incrementó la proporción de industrias en baja (de 43,4% en febrero a 49% en marzo). Lo que ajustó fueron las empresas que se mantuvieron sin variaciones anuales (de 31,9% en febrero a 18,3% en marzo).
En materia de rentabilidad no hubo grandes modificaciones en el mes; sin embargo volvió a caer a 43% la proporción de industrias con rentabilidad positiva (de 48% en enero a 43,9% en febrero). La proporción de empresas con rentabilidad negativa también descendió levemente, de 43,5% en febrero a 43% en marzo.
Por sectores, las ramas que crecieron en marzo en la comparación anual fueron: ‘Material de Transporte’ (13,6%), ‘Productos de metal, maquinaria y equipo’ (1,5%), ‘Productos químicos’ (1,2%) y ‘Alimentos y bebidas’ (1,1%).
En cambio, siguieron cayendo muy fuerte: ‘Maderas y muebles’ (-13,0%), ‘Productos textiles e indumentaria’ (-10,2%), ‘Papel, cartón, edición e impresión’ (-9,7%), ‘Calzado y marroquinería” (-7,9), ‘Productos electro-mecánicos e informática’ (-4,7%), y ‘Productos de caucho y plástico’ (-6,4%).
La incertidumbre sobre el rumbo económico, la caída en la demanda y el incremento de las importaciones redujo nuevamente el ánimo inversor. Sólo 18% de las industrias declaró tener planes de inversión para este año, y otro 23% lo está evaluando. Mientras, el 54% contestó que ‘no’ planea invertir y el 5% restante afirmó que ‘no sabe’. Es que sólo el 9% de las empresas considera que el actual es un buen momento para invertir. Para el resto, el contexto es entre regular, malo y muy malo.
Hacia adelante, las expectativas son muy cautas. El 29% de las industrias relevadas cree que la producción de su empresa aumentará en los próximos meses, el 54% considera que se mantendrá estable, mientras que otro 17% espera que continúe cayendo.
“La actividad tiene síntomas claros de arranque y de que hay con qué. Y en el momento en que lo haga lo hará con una potencia importante porque los proyectos están y hay mucho interés desde el extranjero por la Argentina”, explicó Jorge Göttert, presidente de la Cámara Argentina de la Máquina, Herramienta y Tecnologías para la producción (CARMAHE), y agregó: “El sector ligado a la exportación recuperó mercados de primera línea, los asociados a los países centrales”.
“Estamos convencidos de que para la maquinaria agrícola, más allá de otras luces amarillas que se ven y, en algunos casos, luces rojas, el mercado interno va a ser bueno en general”, dijo Raúl Crucianelli, presidente de la Cámara Argentina Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA). El empresario expresó, además, que todavía es “un país caro” con relación a los costos internos, en especial, al sistema impositivo.