IR A VOTAR

Por Daniel A. Vogel | DIRECTOR – Ir a votar, es nuestro mayor derecho como ciudadanos. Sí, es obligatorio, pero también debe ser una toma de conciencia poder ejercer ese momento único, aunque después se sienta feliz o decepcionado.

Últimamente con los resultados de algunas gestiones de Gobierno, muchos que pagan consecuencias, las que, por acción u omisión, sumergen cada vez más a una mayor cantidad de personas en la zona de pobreza, a esa que nuestros representantes políticos conviven pocas horas una vez cada dos años.

Es precisamente el gran momento donde no solo nos visitan (aunque ahora es por teléfono y redes sociales, ya casi no caminan barrios ni tocan timbres) sin importarles el rancho, la pobreza del humo para calentarse, el pibe lleno de mocos o el viejo orinado.

Ahí, te abrazan, te besan y te prometen todo… claro que es parte de “un circo político” que sigue sumergiendo a nuestro pueblo a la marginalidad, a indiferencia y, siendo habitantes ahora de uno de los países más desprolijos e inestables del planeta, cuando supimos tener la mejor educación y una riqueza tal, que nos decían que éramos el granero del mundo.

Ahora las riquezas como “las vacas son de otro” y del granero, pasamos a ser el basurero del planeta, socioeconómicamente hablando.

Pero, ni ahí que renunciaremos a ejercer el poner el voto, por lo que este domingo tenemos que participar, ser dignos dueños de ese derecho e, ir con la frente bien alta.

Y soñar, que no cuesta nada. Que nuestra descendencia, pueda vivir un día en este bendito país, con mayor decencia.

AL QUE LE QUEPA EL SAYO...