La ONU quiere “soluciones basadas en la naturaleza”

La ONU llamó a ampliar las soluciones basadas en la naturaleza (SBN) para contribuir al mejoramiento de la gestión de agua en el planeta. Lo hizo en el marco del octavo Foro Mundial del Agua, que se realizó en Brasil -por primera vez en Sudamérica-.

Según el documento, divulgado por la Unesco, las SBN se inspiran y apoyan en la naturaleza y se relacionan con la conservación o rehabilitación de ecosistemas naturales. Un ejemplo son los llamados “baños secos”, una alternativa ecológica en el tratamiento de heces humanas que no depende del uso de descargas sanitarias.

“Ampliar el uso de las SBN será un punto central en la realización de la agenda 2030 para el Desarrollo Sustentable”, refiere el documento y añade: “Los abordajes tradicionales no permiten que la seguridad hídrica sustentable sea alcanzada”.

Panorama

El reporte brinda además un panorama del estado actual de los recursos hídricos en el mundo, señalando que la demanda mundial de agua aumenta a un ritmo de 1% anual y que casi la mitad de la población mundial vive en áreas con escasez de agua.


 

La degradación de los ecosistemas es, según la ONU, una de las principales causas de los crecientes desafíos asociados a la gestión hídrica en el mundo. Ante ese escenario, propone el organismo, las SBN pueden servir para “gerenciar la disponibilidad de agua”.

La “agricultura de conservación” es mencionada en el texto como “una de las prácticas destinadas a minimizar los impactos en el suelo, mantener la cobertura vegetal y regularizar la rotación de cosechas”, para intensificar la producción sustentable.


Entre los desafíos y limitaciones a la implementación de las SBN, la ONU manifiesta que existe una “inercia histórica” contra el uso de estas tecnologías, y que “las soluciones de infraestructura ceniza (opuestas a las verdes) predominan en la mente de los formuladores de políticas y el público en general”.

El Foro Mundial del Agua tuvo un escenario dramático de fondo, sobre todo porque en la sede del encuentro, Brasilia, hay racionamiento por una severa sequía, y el país está en el foco global por el escándalo de la minera noruega Hydro, que admitió haber contaminado ríos amazónicos.

“Vertimos agua de lluvia y de superficie no tratada en el Río Pará”, admitió Svein Brandtzaeg, CEO de la empresa que tiene una fábrica de aluminio en Barcarena, en el estado brasileño de Pará.