La investigación se realizó por científicos de la Universidad Tel-Aviv en Israel y los resultados han sorprendido a todos. La clave principal estaría en los pétalos de sus flores.
Muchos hemos escuchado o leído que está comprobado científicamente que las plantas pueden sentir dolor. Sumado a esto, según nuevos estudios se ha comprobado que también pueden oír, al menos de cierta manera.
Los investigadores detectaron que, tras pocos minutos de sentir las ondas sonoras de las abejas cercanas a través de los pétalos, la concentración de azúcar en el néctar que produce la planta aumentó en un 20%.
Los científicos también quisieron comprobar cómo lograban captar los sonidos, por lo que les retiraron los pétalos a las flores. Al hacer esto y exponerlas nuevamente al sonido, no hubo respuesta alguna en el cambio del néctar. Por este motivo concluyeron que las flores actuaban como “oídos” de las plantas.
Pese a que aún no saben cómo decodifican la información que obtienen del sonido y la transforman en una reacción física, creen que fue su forma de adaptarse y evolucionar.
Fuente: Aweita (Perú)