Esta actividad va dentro de las acciones de responsabilidad social empresaria que la compañía lleva adelante en la zona de influencia.
El establecimiento cuenta con 145 niños inscriptos en primaria, la mayoría vecinos limeños, y comparte el edificio con un colegio secundario y un jardín de infantes.
Su directora, Noelia Montero, expresó: “La escuela se inundaba por el deterioro del techo de chapa y cada temporal o lluvia causaba inconvenientes en el edificio. Por la canaleta central del techo ingresaba gran cantidad de agua que filtraba en particular a un aula donde se encontraba la caja de electricidad de toda la escuela”.