El Observatorio de Internet ya recibe cuatro reclamos por día, un 20% más que en 2016. Religión, género e ideología política, entre los motivos.
Todo famoso lo ha sufrido de una u otra manera: desde Selena Gómez y Justin Bieber, pasando por las locales Candelaria Tinelli y Eugenia Suárez, hasta el cantante inglés Ed Sheeran que esta semana decidió abandonar Twitter cansado de que lo insulten. Es que los comentarios agresivos que se multiplican por redes sociales y páginas web, escritos por miles de usuarios anónimos, es algo que acecha a todo el mundo, sea o no “celebrity”. Y el ciberespacio argentino no es una excepción, ya que no solo abundan los “haters” sino que –según las estadísticas oficiales– las provocaciones e insultos en la red van en aumento.
Los datos indican que las agresiones son cada vez más frecuentes: según una recopilación del Observatorio de la Discriminación en Internet que funciona en el INADI, durante 2016 recibieron 1298 denuncias por “odio digital”, a un promedio de 3,5% de denuncias diarias. En lo que va de este año ya tienen 689 denuncias, lo que da un promedio diario de casi cuatro cada 24 horas (3,8% por día). Y el aumento es de larga data, ya que entre 2015 y 2016 la suba fue de cerca del 20%. En cuanto a los motivos, el 21% fue por “religión”, el 15% por “género”, el 12% se enmarca en “racismo”, el 10% se burla de la “diversidad sexual” y la “ideología política”, 7% por “discapacidad”, el 6% por “ser jóvenes” y el 5% por la “condición social”.
“Desde el Observatorio monitoreamos las principales redes sociales tratando de que no circulen mensajes de agresión, buscando frenar la violencia”, explicó el doctor Claudio Presman, interventor del INADI. Y agregó: “en nuestra sociedad la violencia es alta, pero en las redes parece ser todavía más fuerte y, en cierto sentido, bastante incontrolable”. Según su equipo, la mayoría de las denuncias que reciben provienen de agresiones publicadas en redes sociales: “son pocas las que se originan en comentarios de sitios web o blogs”.
Para Sebastián Bortnik, uno de los fundadores de la ONG Argentina Cibersegura, éste fenómeno viene creciendo mucho año tras año. “El anonimato de las redes facilita mucho más a que un comentario genere respuestas “haters””.
Según el doctor Javier López Zavaleta, fiscal especializado en delitos informáticos de la Ciudad de Buenos Aires, toda emisión de opinión en las redes está protegida pero –como en cualquier ámbito– está sujeta a limitaciones. “Ningún derecho es absoluto y somos libres de expresar nuestras ideas hasta que afectamos a un tercero. De ser así, se puede accionar civil o penalmente, si se configura un delito”, explicó. Y detalló que “un comentario agresivo en la web puede configurar delito, por ejemplo, amenaza simple o coactiva, hostigamiento o discriminación”. Salvo el hostigamiento, que es de instancia privada y necesita denuncia del afectado, los demás son de acción pública por lo que la Justicia puede iniciar una causa. Finalmente, recordó que “en la ciudad de Buenos Aires si la discriminación online no llega a configurar un delito, eventualmente, puede ser una contravención”.
En la experiencia de López Zavaleta, lo que suele pasar con los agredidos por “haters” es que estos bloquean al agresor o lo denuncian en la misma red. “No es común que terminen en sede penal”.
Aunque es un problema generalizado, los más afectados suelen ser los menores. “En una encuesta que hicimos hace unos meses en chicos de 13 a 18 años, el 33% indicó haber recibido mensajes desagradables o hirientes por internet en el último año”, recordó María José Ravalli, especialista en Comunicación de UNICEF Argentina. Ravalli detalló que es usual que los chicos reciban mensajes negativos hacia su persona, agresivos o discriminadores a través de las redes.
UNICEF Argentina lanzó el año pasado junto al INADI la campaña #NoDaCompartir, para sensibilizar a la población sobre la necesidad de no viralizar los contenidos que acosan, que ofenden o discriminan a otras personas.
Todas las redes sociales han instrumentado mecanismos de denuncia y bloqueo a las que pueden recurrir los afectado por agresiones o comentarios. Desde Facebook aseguraron que es un tema que trabajan activamente. “Estamos eliminando mensualmente unos 288 mil mensajes, en todo el mundo, reportados por ser “discurso de odio””. Y agregaron: “estamos enfocados en agrandar los equipos de respuesta al contenido agresivo reportado por usuarios. Estamos sumando 3 mil nuevas personas a estos grupos, que se unirán a los 4500 que ya están avocados a analizar estas temáticas”.
Desde Twitter explicaron que las personas deben ser capaces de expresar opiniones y creencias, “pero hacemos una clara distinción entre libertad de expresión y conductas que incitan a la violencia y el odio”. Y detallaron que la seguridad “es prioridad y están desarrollando mejores herramientas para dar más control sobre la red y así combatir mejor el abuso”. Según la empresa los usuarios pueden reportar contenidos agresivos.