El fútbol del Viejo Continente está en vilo por reclamos de jugadores que piden bajar la cantidad de partidos en el año. Las principales estrellas ya alzaron la voz y desde España e Inglaterra pujan por un parate.
La continuidad del fútbol europeo está en serio riesgo. A semanas de que haya empezado la actividad de la nueva temporada, una amenaza de huelga de parte de los futbolistas se expande por el continente y la chance parece cada vez más concreta después de que se sumaran al reclamo las principales figuras, desde jugadores de la talla de Rodri, Dani Carvajal y hasta el argentino Rodrigo De Paul. Detrás de la medida está el FIFPro, el sindicato de futbolistas profesionales, y responde a una ola de lesiones que azota los principales clubes.
El que primero alzó la voz y su declaración resonó fue el volante central del Manchester City, candidato a ganar el Balón de Oro. “Estamos cerca de ir a la huelga”, reconoció el español la semana pasada. El campeón de la Eurocopa se había perdido la pretemporada por un problema en los isquiotibiales y este domingo, en el empate del City ante Arsenal, se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha, por lo que se perderá el resto de la temporada.
Al reclamo del mediocampista se sumaron muchos más. “Rodri tiene razón: hay demasiados partidos. Hoy comienza para nosotros la Champions League, un viaje esperemos que sea largo y que, con suerte, no termine mal en términos de salud”, dijo Willi Orban, defensor del Leipzig.
“Este año hubo competición con la Selección, el próximo año es el Mundial de Clubes y después la Copa del Mundo. Parece que si todo va bien durante algunos años no vamos a tener muchas vacaciones. Creo que es un caso para analizar”, cuestionó el campeón del mundo De Paul en una nota con CNN Sports.
Los cuestionamientos más fuertes llegan desde Inglaterra y España. En el primer caso, además de Rodri también hablaron Manuel Akanji, compañero suyo, y Alisson, arquero del Liverpool, y Maheta Molango, al frente de la Asociación de Futbolistas Profesionales del país, reconoció que los apoyarán hasta las últimas consecuencias.
Por su parte, en España hubo revuelo por las declaraciones del técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti, y hasta el poderoso Javier Tebas, presidente de La Liga. “Aquí el fútbol necesita reflexionar porque el objetivo es intentar jugar menos partidos parea evitar lesiones. Si eso llega bajando el salario, no creo que los jugadores tengan ningún problema en bajar su salario si juegan menos”, marcó el DT italiano.
En cambio, el dirigente prácticamente dio por hecho el parate. “Los sindicatos y las ligas estamos bastante unidos. No se puede seguir con nuevas competiciones como se está haciendo. Ponen en peligro la salud de unos jugadores y el ecosistema de una gran mayoría jugadores. El riesgo es latente, cercano y más aún con obligaciones de competiciones sin pensar qué pasa con los efectos de la industria del fútbol”, avisó.
¿Qué pasó en España para que surgieran tantas críticas? El fin de semana, en 48 horas hubo 14 lesionados en La Liga. Real Valladolid, con tres bajas, fue el más afectado. Sevilla y Las Palmas aportaron otros dos cada uno.
Como ente defensor de los futbolistas se encuenta FIFPRO, que hace unas semanas publicó un informe con datos alarmantes: el 72 por ciento de los jugadores consultados apoyaban la medida. Además, alertaron que planteles y futbolistas podrían llegar a disputar más de 70 partidos en la temporada, sin contar el cansancio generado por los viajes, especialmente para aquellos que representan a seleccionados de otros continentes.
El caso más resonante es el del argentino Julián Álvarez, que entre la Copa América, los Juegos Olímpicos y sus compromisos con el City, club en el que jugó hasta mitad de año, completó 83 convocatorias y 75 partidos en el año. El gran cambio se dio en estos años de mayores competiciones. Por ejemplo, Jude Bellingham, con 21 años, ya había disputado en 251 partidos oficiales, mientras que su compatriota David Bechkam, cuya carrera se desarrolló entre 1991 y 2013, a esa edad sumaba apenas 54 presentaciones.
Los sindicatos europeos de futbolistas ya presentaron una demanda ante la FIFA para buscar una solución y acusando de ilegal la sumatoria de certámenes y obligaciones sin haberlo consensuado con los jugadores, en definitiva, los actores principales del espectáculo que está agotado.