Terminó mejor de lo que venía. A pesar que la chance de pelear por el título de forma directa pareció nunca estar cerca de la mano, Federico Pérez Ponsa (2594) culminó cumpliendo con creces su labor en la 92° edición de la Final del Campeonato Argentino Superior de Ajedrez. Principalmente porque el Gran Maestro zarateño quedó no sólo dentro del podio, sino como subcampeón nacional, algo muy des-tacado y que reitera una vez más, que se mantiene entre los mejores ajedrecistas del país. De todas maneras, la sensación que dejó esta importante competencia fue la gran paridad que hubo entre los 14 participantes, algo pocas veces visto, teniendo en cuenta que se igualaron más de la mitad de las partidas disputadas. Para ser más precisos, se jugaron 91 partidas entre las 13 rondas, donde hubo tablas en 51. O sea, el 56%. Y dentro de esa tendencia estuvo Pérez Ponsa, quien a pesar de haber terminado invicto, sólo logró cosechar tres triunfos (entre ellos derrotar al N°1 del ELO nacional, GM Sandro Mareco), sin poder derrotar a jugadores de menor ranking como el MI Pablo Acosta (2409), Emiliano Cuberli (2248), MI Cristian Dolezal (2426), entre otros; que le hubiesen presentado un panorama diferente al zarateño. Vale recordar que la primera parte del torneo, fue la más difícil para Federico, logrando siete igualdades consecutivas (3,5 puntos en 7 rondas), mientras que luego aparecieron las victorias y logró 4,5 sobre 6. Por eso, la sensación quizás sea algo agridulce para Federico, ya que más allá del subcampeón, pareció que podía dar más teniendo en cuenta su ranking y que según la preclasificación terminó con -5,7 ELO. Como premio consuelo (además de los $20.000 en efectivo por el segundo lugar), le quedó al zarateño la chance de volver a formar parte del equipo Olímpico Argentino que participará en la Olimpiada de Batumi, Georgia en el 2018.
Esta situación la padeció la mayoría de los jugadores. Salvo el campeón GM juninense Diego Flores (2574), quien también fue invicto, pero ganó cinco de sus últimos siete juegos y con eso marcó la diferencia para adueñarse de la punta y consagrarse otra vez Campeón Argentino Superior y de manera anticipada.