El sistema trabaja de forma distinta al botón antipánico, ya que anticipa el contacto del agresor. Además, se activa en caso de que intente romper o sacarse el dispositivo.
El dispositivo consta de tres partes: una pulsera y dos controles. Al agresor se le coloca la pulsera y uno de los controles, y se le entrega a la víctima el otro control. Este sistema trabaja de forma distinta al botón antipánico, ya que anticipa el contacto del agresor. Además, se activa en caso de que el agresor intente romper o sacarse la pulsera.
Para la recepción de los dispositivos, el intendente Nicolás Ducoté recibió a Agustina Ayllón, presidenta del Instituto de Género y Diversidad Sexual de la Provincia.
Tras la reunión, Ducoté destacó: “Este sistema funciona de manera preventiva y se suma a todo el acompañamiento que brindamos: lo que buscamos es que se modifiquen las conductas para que estas herramientas dejen de ser necesarias”.
Por su parte, Ayllón expuso: “Este es un programa nacional que llega a las provincias: se comenzó con una prueba piloto durante un año y medio, y como la experiencia fue muy positiva, estamos haciendo una primera etapa con doce municipios. Este dispositivo le saca a la víctima la necesidad de estar ella vigilando en qué momento está en peligro, sino que se monitorea a través del Servicio Penitenciario Bonaerense, que ve el movimiento para evitar que el agresor llegue a la víctima. Trabajar articuladamente con el Municipio para nosotros es fundamental”.
Cabe señalar que una vez que se coloquen las primeras pulseras, desde el Municipio se solicitarán, progresivamente, más unidades a la Provincia.
Por otra parte, para garantizar el correcto funcionamiento del dispositivo, desde el área de Género junto con el Instituto Provincial de Género y Diversidad Sexual, se mantuvieron diferentes reuniones con jefes policiales, la Fiscalía de Género y juezas de familia, para dialogar sobre el trabajo articulado e implementación de este nuevo sistema que ya entró en vigencia.
Fuente: Pilar a Diario