¿Puede el Mundial aumentar el riesgo de enfermedades?

Un estudio evalúa los riesgos sanitarios del Mundial de Rusia 2018: ¿pueden expandirse más enfermedades en este evento masivo?

Dado que hablamos de un evento masivo que reúne a personas de todo el globo, cabe preguntarse si el Mundial podría ser un foco de propagación de enfermedades. Por ejemplo, en algunos macro festivales al aire libre se han dado brotes de infecciones y enfermedades como la gripe o el sarampión debido a la aglomeración de gente, muchas veces en condiciones higiénicas que dejan bastante que desear.

Otro factor de riesgo a considerar es que muchas personas viajan al país de destino sin ponerse las vacunas recomendadas.

Un equipo de investigadores liderado por la doctora Natalia Pshenichnaya, de la Universidad Estatal de Rostov (Rusia), publica una nota al respecto en la revista Travel Medicine and Infectious Disease, donde analiza los posibles riesgos a considerar por los viajeros que asisten al Mundial y emite una serie de recomendaciones.


 

Para la tranquilidad de los más hipocondríacos, los autores no encuentran en este evento un riesgo especial de contagio de enfermedades infecciosas, basta seguir unas ciertas normas de seguridad y sentido común, como beber agua embotellada y evitar consumir alimentos que no garanticen unas mínimas condiciones de higiene para evitar gastroenteritis.


Ojo con las garrapatas

Los investigadores también señalan que algunas de las ciudades sede del Mundial se encuentran dentro de regiones en las que existe un alto potencial de contagio de encefalitis viral (TBE) y borreliosis. Se trata de dos enfermedades que se transmiten por la picadura de garrapata, y muchas áreas del centro y norte de Europa tienen un verdadero problema con este tema. En Rusia se registran más de seis mil casos de borreliosis cada año y dos mil de TBE.

En todo caso en las ciudades apenas existe riesgo de contagio, por lo que los viajeros que aprovechen su estancia en Rusia para hacer excursiones por el campo deben tener cuidado con ello.

Para evitar el contagio, lo mejor es cubrirse bien el cuerpo y pasear por caminos abiertos: muchas veces las garrapatas se encuentran en las hojas de los matorrales y aprovechan el paso del ganado o de los humanos para engancharse en su cuerpo. También es bueno revisarse bien el cuerpo después de la salida: las posibilidades de contagio aumentan cuantas más horas esté la garrapata enganchada a nuestra piel. Existen también repelentes específicos y vacunas frente a algunos tipos de TBE (en el caso de la borreliosis no hay vacuna), aunque los autores no recomiendan vacunarse si no se van a visitar zonas rurales.


 

¿Qué ha sucedido en otras competiciones?

Los autores hicieron un repaso de otros eventos deportivos masivos y encontraron pocas evidencias de brotes de infección, con la excepción de un brote de gripe que afectó a 36 participantes de los Juegos Olímpicos de Invierno en Salt Lake City (EEUU) y un pequeño brote de gastroenteritis que sufrió uno de los equipos que jugaron una competición de vela previa a las olimpiadas de Brasil en 2016.

Fuente: Muy Interesante