Los síntomas más comunes son cara redonda y rubicunda, obesidad en tronco y abdomen, debilidad muscular, estrías y piel muy fina, siendo fundamental el diagnóstico temprano y tratamiento oportuno. La causa más frecuente es la administración de fármacos que contienen corticoides. Entre 2010 y 2023, en el Hospital Británico se operaron 41 pacientes con esta afección, en su mayoría mujeres

Cada 8 de abril se conmemora el Día Mundial de la Enfermedad de Cushing, una de las 8.000 afecciones raras o poco frecuentes, que se genera por el exceso de cortisol y cuyo diagnóstico temprano es esencial para poder lograr un tratamiento eficaz para el paciente.

El síndrome de Cushing es el conjunto de signos y síntomas producidos por la exposición excesiva y prolongada de los tejidos a excesivas cantidades de cortisol. Su causa más frecuente es la administración de corticoides a través de fármacos, indicados para tratamiento de múltiples enfermedades inflamatorias, autoinmunes, oncológicas, asma, trasplantes, entre otros.

La Dra. Mónica Loto, Staff de Endocrinología, Metabolismo, Nutrición y Diabetes del Hospital Británico, explica que “cuando el exceso de cortisol obedece a la presencia de un adenoma (un tipo de tumor benigno) en la glándula hipófisis (ubicada en la base del cerebro), se denomina enfermedad de Cushing, siendo ésta la responsable de alrededor del 70% de los casos de exceso de cortisol generado por el propio organismo”.

Las manifestaciones clínicas más habituales son:

● Cara redonda y rubicunda (facie de luna llena)
● Obesidad central (en tronco y abdomen, aunque con brazos y piernas delgados)
● Debilidad muscular proximal (sobre todo en brazos y piernas)
● Estrías anchas (de 1 cm o más) y rojas
● Piel muy fina, con hematomas que se producen ante mínimos roces

Otros signos y síntomas menos específicos, y que pueden corresponder a otras patologías:

• Inestabilidad emocional y depresión
• Fatiga severa y debilidad muscular
• Osteoporosis y aumento de la tasa de fracturas
• Aumento de los niveles de azúcar en sangre (diabetes o prediabetes)
• Aumento de los niveles de presión arterial
• Predisposición a las infecciones
• En mujeres: alteraciones del ciclo menstrual, acné, aumento del vello corporal
• En hombres: impotencia sexual
• Aparición de giba dorsal por acumulación de grasa

“Muchos de los síntomas se comparten con otras enfermedades, metabólicas, psiquiátricas, ginecológicas, por lo cual el diagnóstico puede tardar varios años. Y este retraso afecta seriamente el pronóstico de la enfermedad, ya que el hallazgo temprano y el tratamiento oportuno son fundamentales en la evolución”, indica la Dra. Loto.

A la hora de realizar un diagnóstico certero, el Dr. Santiago González Abbati, Staff de Neurocirugía del Hospital Británico, recalca que “siempre es fundamental descartar, en primera instancia, la administración externa de corticoides, no solo en comprimidos o inyecciones sino también en crema, gotas, aplicaciones intraarticulares. El diagnóstico basado en la clínica debe sustentarse en exámenes de laboratorio específicos, resonancia cerebral, estudios visuales y cateterismo de senos petrosos, según el caso”.

En cuanto al tratamiento, subraya que en primera instancia será quirúrgico, destinado a remover el adenoma. “Es fundamental que el neurocirujano tenga experiencia en la resección de estos tumores, ya que esto condiciona en gran parte el éxito terapéutico y la tasa de complicaciones que pudieran presentarse durante la cirugía. En caso de no lograrse la remisión de la enfermedad, pueden utilizarse otros recursos terapéuticos, tales como radioterapia o fármacos, que serán indicados por el especialista”, afirma González Abbati.

El Hospital Británico cuenta con todos los recursos para tratar este tipo de patología, con un equipo interdisciplinario en constante comunicación integrado por cirujanos experimentados, endocrinólogos y neurooftalmólogos, además de un laboratorio especializado e infraestructura para la realización de diagnósticos por imágenes y hemodinamia.

Entre 2010 y 2023, en el Hospital Británico se operaron 41 pacientes con diagnóstico de Enfermedad de Cushing (30 mujeres y 11 hombres, con edad promedio de 38 años); y en el 80% de los casos se logró remisión luego de la intervención quirúrgica.