Un equipo multidisciplinario ha creado un dispositivo que permite evaluar parámetros como la presión y temperatura sin necesidad de cables o componentes electrónicos complicados.
El sensor minúsculo que se puede inyectar a través del cráneo con una aguja, destinado a monitorear la salud cerebral se disolvería completamente en cuestión de semanas. Estos sensores han sido probados en animales y podrían, en el futuro, proporcionar implantes humanos...