La investigación de la Universidad Nacional de Córdoba señala que la irritación provocadas por prótesis mal colocadas o las piezas dentales en mal estado incrementan las chances de contraer la enfermedad, que a su vez "es mayor cuando la persona consume tabaco o alcohol, incluso en cantidades moderadas".
La irritación mecánica crónica o trauma provocadas por prótesis mal colocadas, desajustadas...