Aun cuando sea una costumbre muy arraigada, los restos de carne a la parrilla no son buenos para los perros. La sal y los condimentos que suele tener irritan el estómago de los animales y hace que deban beber mucha más agua.
"Eso recarga el corazón y los riñones, lo que para animales mayores o crónicamente enfermos incluso puede ser...