Por María Celsa Rodríguez * - Cuando Nahir Galarza confesó el crimen de su novio horas después de haberle disparado dos veces con el arma reglamentaria de su padre, -un oficial de la Policía de Entre Ríos-, había cumplido con el mandato que las feministas-feminazis dejan en sus grafitis, y cuyos cantos gritan en las manifestaciones públicas.
Hoy la familia...