Un triunfo que vale mucho. No sólo en lo estadístico, porque ya se aseguró de forma anticipada el tercer puesto de la División Bonaerense (en el peor de los casos) y además porque todavía se mantiene en la pelea por soñar por el puesto de escolta. Y como si eso fuese poco, también deja en claro, que el plantel de Bogliacino sigue creciendo y que está a la altura de los mejores elencos de este grupo. Más allá que el trámite fue parejo casi de principio a fin, Zárate Básket logró sobreponerse a sus debilidades de la baja talla física (ante las torres derquinas) y ganar dando una muestra de carácter por 78 a 77, con un doble de Cassinelli a falta de tres segundos. En el único momento donde Zárate Básket fue claramente dominado fue en el transcurso del cierre del primer cuarto y el arranque del segundo, donde Derqui imponía sus centímetros en la zona de la pintura (con Baquero y Mansilla), pero además le agregaba los triples de Toranzo y Michelini para sacar 11 (26-15). Pero el elenco de Bogliacino reaccionó rápidamente con los triples de Pascolatt y Pineda, que le permitieron revertir el cotejo (30-34). La defensa zonal que propuso Zárate Básket complicó mucho a Derqui, que se mostró impreciso en el manejo del balón y el elenco zarateño lo lastimó de contragolpe. A partir de ahí el cotejo fue equilibrado, con pequeños momentos de cada equipo. Zárate Básket se fue abajo al entretiempo (39-36), pero en el tercer cuarto encontró buenas respuestas en el banco con los ingresos de Méndez, Carugatti y Mora, para pasar al frente (53-58). En el cuarto, Zárate Básket amenazó con quebrar a Derqui (62-69), pero se equivocó en algunos y estuvo errático desde la línea, lo que le permitió a los locales reaccionar, con un Mansilla encendido. Así el cierre fue palo y palo. Derqui parecía que se lo llevaba (77-76) a falta de 7 segundos, pero los zarateños tenían en Casinelli la carta ganadora y el perimetral no fallo, anotando a falta de 3 segundos y dándole una victoria que sirve mucho desde lo anímico y que además lo mantiene con una mínima chance de luchar por el segundo puesto.