Por Eduardo Rivas – En las últimas semanas debimos dedicar tres columnas a denunciar los hechos de censura que con el beneplácito y la anuencia del gobierno municipal encabezado por Ariel Ríos, se han desarrollado en Zárate en el ámbito de las conferencias de prensa realizadas por la Secretaría de Salud encabezada por Marcelo Medina y Ariel Enjuto.
Lo dijimos días atrás.
Vinieron por Luciana Oppici, no se preocuparon porque no trabajan en tele. (https://principedelmanicomio.wordpress.com/2021/12/31/una-nueva-propuesta-de-prensa/)
Vinieron por Eduardo Rivas, no se preocuparon porque no tienen un blog. (https://principedelmanicomio.wordpress.com/2022/01/08/ariel-rios-es-dictador/)
Vinieron por Matías Torres, no se preocuparon porque no están en un medio ‘enojado’ con el Municipio. (https://principedelmanicomio.wordpress.com/2022/01/15/optimizando-recursos/)
Cuando vengan por el próximo será tarde.
Y quien mal y tarde se refirió a la censura fue el Intendente putativo Ariel Ríos, quien fue entrevistado la semana pasada por Marité Pérez en FM Libre donde dejó algunas definiciones interesantes que, entendemos, merecen ser analizadas y contestadas porque no pueden dejarse pasar por alto.
En primer lugar Ríos se refirió al caso de Luciana Oppici, él cree que ‘no hubo un caso de censura porque pudo preguntar todas y cada una de las cuestiones’. Miente Ríos y esto es fácilmente observable en el video de dicha conferencia de prensa. O el Intendente vive en una realidad paralela o no tiene la inteligibilidad de discernir qué es lo que está ocurriendo, puesto que es notorio como se coartó a Oppici la posibilidad de seguir preguntando tras el grito del Director de Prensa, y proveedor del Municipio, el Pepito Cibrián de la Salada, José María Álvarez. De hecho explicó que la situación se saldó tras una reunión entre Oppici y Ríos, lo cual también es FALSO porque esa reunión nunca existió. Como siempre Ríos miente.
Y avanza Ríos afirmando que ‘no creo que haya habido un tema de censura en el caso de Luciana’… y entonces cabe preguntarse, si en ese caso no, ¿En qué otro caso sí?
En referencia a lo que Ríos llama ‘el segundo tema’, que es mi exclusión de la conferencia de prensa del pasado 7 de enero y la expulsión posterior del grupo de WhatsApp de prensa del Municipio en el que recibíamos, según su propia definición, ‘información privilegiada’, el Intendente putativo se justificó en que era la primera conferencia de prensa vía streaming y que, por lo tanto, no estaba al tanto de lo que pasaba. Punto en su favor que reconozca sus limitaciones, el problema es qué es lo que hizo cuando se enteró de lo ocurrido. Y no hizo nada.
Y entonces se despachó de lleno sobre mi persona. ‘El caso de Eduardo Rivas acá hay un equilibrio bastante importante y yo no soy quien para juzgar a nadie pero me parece que hay que dividir a aquellos que tienen un programa de periodismo, aquellos que son periodistas que históricamente ejercen la profesión o están dentro del Partido, de las ciudades, con aquellos que tienen una posición política y son operadores’. Es decir, en este caso sí hay censura, y pretende justificarla.
No sé cuáles son sus pautas para determinar quién es periodista y quién no, Intendente, y no me gusta hablar en términos autorreferenciales, pero por si lo desconoce le comento. En Zárate soy columnista en el Diario El Debate y en las Radios Alfa, Libre y Rock. A nivel nacional soy columnista en Memo, de la Provincia de Mendoza, y ocasionalmente, en Diario Perfil y Clarin. A nivel internacional soy columnista de Diario 16 en España, el diario de la transición española, colaboro con publicaciones de Brasil y Colombia. ¿Eso sirve para que me considere periodista? ¿El problema es la residencia? No creo que lo sea, de hecho su mentor ha dado infinitas entrevistas (y dinero de los contribuyentes) a medios de fuera de Zárate que a medios locales, aunque justo es reconocer que a algunos medios locales también le han distribuido mucho dinero. Usted nunca dijo absolutamente nada al respecto, sino que lo avaló y aprobó con su actuación como concejal, incluso al margen de la ley.
¿Cuál es el problema entonces Ríos? ¿A qué se refiere con ser operador? ¿Qué tipo de operaciones realizo? ¿En favor de quién? ¿Financiadas por quién? ¿En contra de quién? Cuénteme porque no me entero.
Sí me hago cargo, y creo que es justo que lo haga, de las operaciones que realizo en pos de la transparencia, la honestidad, el acceso a la información y el derecho del pueblo a saber lo que pasa, como aquel 25 de mayo. Soy operador de la verdad. Y lo hago de manera individual, con mis recursos y mis herramientas. De hecho, la mayoría de las veces también lo hago contra sus intenciones y sus acciones, porque mientras usted promueve la mentira yo fomento la verdad, mientras usted viola la ley yo denuncio los hechos ante la justicia, mientras usted se esconde yo me muestro, mientras usted calla yo hablo.
Si usted habla de operaciones, ¿Qué operaciones hace usted? ¿En favor de quién? ¿Financiadas por quién? ¿En contra de quién?
Dice usted que ‘con los periodistas no tengo ningún problema, nunca he tenido un problema a aquellos que tienen otra línea de trabajo, bueno, será otro el lugar de discusión, será el Concejo Deliberante, será la discusión política’. Le tomo la palabra Intendente, coordinemos una entrevista, porque estoy convencido que la discusión política no la sostendrá. Ponga día y horario. Quisiera hacerle una entrevista para desmitificar estos preconceptos que tiene sobre mi persona, que usted sabe que son equivocados. Nos conocemos y desde hace rato, lo ví caminar la Casa del Pueblo en los noventa cuando todavía no se habían unificado con el PSO y dudaba entre acompañar a sus compañeros del PSD o a sus aliados del PSP con Daniel Alonso a la cabeza, y las calles de La Plata cuando Osvaldo Cáffaro era Diputado Provincial y usted su mandadero de turno, época en que el despacho de la Calle 8 se decoraba con un cuadro de la casa de Karl Marx en Trier y no con fotos protocolares como ahora. No sirve hacerse el desentendido, Ríos, los dos sabemos quién es quién y hay que asumir responsabilidades. Nos conocemos y no somos tantos.
Póngase los pantalones largos y asuma su responsabilidad.
Asuma que es el hombre manos de tijeras, reconozca que es el censor.
Si realmente cree en lo que dice cuando menciona ‘Con toda franqueza, la realidad es que todos tenemos derecho de preguntar […] entiendo que el futuro es de las redes sociales’, acepte la invitación de tener una entrevista para charlar sobre la realidad del Municipio para un blog. Lleve carpetas, informes, asesores y hasta las lindas presentaciones, aunque con faltas ortográficas, que le preparan desde el área de diseño… pero lleve la verdad, porque tengo las pruebas que es un mentiroso y quisiera que me lo desmienta de cara a los vecinos. Haga el esfuerzo, aunque sé que le va a costar.
Y hacia el final de la entrevista, o al menos del corte que pudimos conseguir, llegaron verdaderas definiciones ideológicas, incongruentes e incoherentes con lo formulado hasta entonces, pero que abren una serie de interrogantes respecto a la capacidad de Ariel Ríos para ocupar el puesto que ocupa. Si así no fuera no podría haber mencionado que ‘Hay gente que ejerce con responsabilidad aún siquiera sin una formación pero lo ejerce con responsabilidad política, que puede tener un posicionamiento político porque es parte de la democracia, ahora distinto aquellos que basados en elementos políticos tienen una cuestión de hostigamiento de determinadas personas entonces eso no, pero aparte son de un signo político. Entonces la discusión es en el Concejo Deliberante, en una discusión de candidatos, en una discusión política, pero no mediante la prensa, digo, ¿se entiende?’
En una diatriba de acusaciones infundadas e incomprobadas, refiriéndose a mí, enumera que no tengo formación para ejercer como periodista. Miente. Y si está interesado en mi formación lo hablamos, sin problemas. Le pido un favor antes, comience por contar la formación que tiene para ejercer el puesto que ejerce, que notoriamente holgado le queda y al que llegó por la fidelidad, lealtad y obsecuencia, durante más de dos décadas, a Osvaldo Cáffaro. Afirma que tengo una cuestión de hostigamiento de determinadas personas. ¿De quiénes? Inicialmente le comento que cuestiono y discuto políticas, no personas, pero si le interesa ese análisis en un rápido repaso de mis notas encontrará que discuto el accionar de todos los partidos políticos, de todos sus dirigentes, y siempre en favor de los vecinos. ¿Sabe qué pasa, Ríos? Usted entiende las cosas al revés. Yo entiendo que usted crea que tengo encono para con el Intendente Cáffaro, pero es él quien más acciones realiza en Zárate… y uno de quienes peor las hace. Sería mucho más sencillo para mí, y menos ‘hostigante’ para él, si no mintiera. Si no engañara. Pero lamentablemente no es así, y usted lo sabe. Está documentado.
Dice usted, Ríos, ‘Entonces la discusión es en el Concejo Deliberante, en una discusión de candidatos, en una discusión política, pero no mediante la prensa, digo, ¿se entiende?’ Es increíble su ignorancia. ¿Qué cree que hizo Mariano Moreno al fundar la Gaceta de Buenos Aires? ¿Crear un medio para recibir pauta y ser el portavoz del gobierno? No, hacer política. El problema para usted no es donde se hace política, el problema para usted es que no sabe hacer política.
Y realiza una definición más que curiosa en la que me quiero detener. Afirma usted, en referencia a mí, ‘aparte son de un signo político’. ¿Quién no lo es? Todos, a cada momento, tomamos posiciones políticas. Elegimos con qué medio informarnos, dónde realizar nuestras compras, dónde educar a nuestros hijos, a qué club ir, todo es política en la vida, Ríos. En su ignorancia, lo que usted quiso decir es un posicionamiento partidario, porque confunde conceptos… y eso que usted cree que está preparado. Y al respecto le consulto, en su opinión, ¿Cuál es mi posicionamiento partidario? Y de paso, ¿Cuál es el suyo? Porque mire que pasó por muchos lados, eh.
Pero bueno Ríos, más allá de todo me quedo con su frase final. Dijo ‘Esta es mi posición y estoy abierto a toda discusión […] siempre con nombre y apellido, no en el anonimato.’
Yo soy como como el Cantor de Fonseca que entonaba Carlos Vives, doy mi apellido y nombre de pila, sabe mi teléfono porque me bloqueó en WhatsApp, y si no lo sabe lo puede consultar con quién me echó del grupo InfoMedios, sabe mi cuenta de Twitter, aunque ahí también me bloqueó, conoce mi cuenta de correo porque me pidió que no le mandara mails, tiene como comunicarse conmigo. Si está dispuesto a la discusión, démosla, no la niegue, no se esconda. No haga como sus funcionarios que hacen, no se hacen cargo de lo que hacen, y luego vuelven ‘con la cola entre las patas’ porque los obligan a disculparse.
Si tiene el valor de cumplir con su palabra póngala en práctica y acepte una entrevista en la que podamos debatir sobre la realidad local, sobre las mentiras que usted le dice a los vecinos y las verdades con las que yo desmonto sus embustes y patrañas.
Por mi parte me comprometo a seguir operando en favor de la verdad, la transparencia, la honestidad, el acceso a la información y el derecho del pueblo a saber lo que pasa.
¿Usted a qué se compromete?
Espero su llamado.
No recule.
