Sólo quedan dos ejemplares hembra, pero afortunadamente una sofisticada técnica de fertilidad podría salvar a esta especie de la extinción definitiva.
La fecundación artificial gracias al esperma congelado de Sudán y la creación de embriones de rinoceronte fabricados en el laboratorio es el último rayo de esperanza para los Ceratotherium simum cottoni, nombre científico para el rinoceronte blanco del norte.
Es la primera vez que una técnica tan sofisticada trata de ponerse en práctica en rinocerontes.
La Universidad de California y el Zoológico de San Diego han desarrollado un innovador método que podría ayudar a realizar una fecundación in vitro: se trata de un robot flexible con forma de serpiente, que facilitaría a los zoólogos la realización de inseminación artificial y transferencia de embriones.
“Consistiría en un catéter largo y delgado que se puede dirigir a través del cuello uterino de una rinoceronte hembra para entregar una muestra de esperma al útero”, detalla Michael Yip, profesor de ingeniería eléctrica e informática en la Universidad de California en San Diego, en un comunicado de prensa.
El objetivo final es producir una manada autosostenible de rinocerontes blancos del norte, primero en cautiverio y luego de vuelta a la naturaleza.
“Todavía faltan muchos años para conseguirlo, pero tenemos excelentes colaboradores tanto aquí como en todo el mundo que trabajan con nosotros y ayudan a avanzar de manera constante en esa dirección”, reconoce.
Fuente: Muy Interesante