Se trata del primer estudio en el mundo realizado por médicos del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez que prueba la eficacia de un tratamiento de sólo 30 días para evitar la transmisión durante el embarazo de la enfermedad de Chagas.
Médicos del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez realizaron el primer estudio del mundo que prueba la eficacia de un tratamiento de sólo 30 días para evitar la transmisión durante el embarazo de la enfermedad de Chagas, un “avance fundamental” para erradicar el Chagas congénito, considerado como la principal vía de contagio de esta infección en nuestro país, anunciaron a Télam los responsables de la investigación.
Se trata de la primera publicación científica a nivel internacional que muestra el efecto del tratamiento “de 30 días o menos en mujeres en edad fértil para prevenir la transmisión vertical de la enfermedad de Chagas”, señaló a esta agencia Guillermo Moscatelli, autor principal del estudio y médico de planta del Hospital Gutiérrez.
La recomendación de pasar del tratamiento estándar de 60 a 30 días fue incluida esta semana en las Guías Latinoamericanas de Infecciones Congénitas y Perinatales de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica (SLIPE) a raíz del estudio que se publicó el 22 de enero en la revista científica PLOS Neglected Tropical Diseases.
El trabajo, titulado “Eficacia del tratamiento de corta duración para prevención de la transmisión congénita de la Enfermedad de Chagas: un estudio de cohorte retrospectivo”, fue realizado por médicos del Servicio de Parasitología y Chagas del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y del Instituto Multidisciplinario de Investigaciones en Patologías Pediátricas (Imipp), una unidad ejecutora de Conicet que funciona dentro del hospital.
“Nuestro estudio proporciona evidencia convincente de que una duración más corta del tratamiento (30 días) no solamente es efectiva, sino también beneficiosa para prevenir la transmisión transplacentaria de la enfermedad de Chagas”, se apuntó en el texto del estudio.
El tratamiento consiste en la administración de los fármacos benznidazol o nifurtimox en forma de pastillas, brindadas de forma gratuita por el Ministerio de Salud a través del Programa Nacional de Chagas.
Sobre la importancia del resultado, Moscatelli precisó que “es una de las patas fundamentales para que no haya más Chagas congénito, la vía más importante de transmisión en nuestro país”.
Qué es el Chagas
Es una infección causada por el parásito Trypanosoma cruzi (T. cruzi) que se puede propagar de modo vectorial a través de la picadura de insectos conocidos como “vinchucas”; de modo vertical cuando una persona gestante tiene Chagas y lo transmite a su bebé durante el embarazo o en el momento del parto; o a través de transfusiones de sangre de personas con la infección.
Generalmente no presenta síntomas, y solo 3 de cada 10 personas que tienen la infección pueden desarrollar la enfermedad. En estos casos puede afectar el corazón, el sistema digestivo (esófago o colon) o el sistema nervioso.
En Argentina la transmisión vectorial con la vinchuca está “relativamente controlada, pero lo que no estamos controlando es la gran cantidad de mujeres con Chagas que tienen hijos”, advirtió Moscatelli, también investigador del Conicet.
En Argentina cada año nacen entre 1.200 y 1.300 bebés con Chagas congénito, de los cuales solo un tercio es diagnosticado, según datos oficiales.
“Y de esos 400 que son diagnosticados, solo reciben tratamiento alrededor de 100 recién nacidos por año”, detalló Moscatelli, quien alertó que estas cifras son “una locura total”.
En América Latina la prevalencia de la enfermedad de Chagas entre mujeres embarazadas varía del 5% al 40%, dependiendo de la ubicación geográfica y se estima que aproximadamente 2 millones de mujeres en edad reproductiva en las Américas están infectadas con T. cruzi, y entre el 3 y el 10% de ellas transmitirán la infección a sus fetos por vía transplacentaria, lo que resulta en un nacimiento anual de 9.000 bebés infectados.
La investigación publicada incluyó un total de 40 niños nacidos de 27 mujeres que recibieron el tratamiento durante 30 días y fueron atendidas en el Hospital Gutiérrez.
“Puede parecer que no es grande el número de madres, pero sí lo es si se tiene en cuenta que hubo cero transmisiones. No hay un solo estudio que demuestre que una madre tratada haya transmitido, por eso está más que claro que el tratamiento sirve para evitar la infección congénita”, apuntó el médico pediatra.
Tratamiento corto
Entre las ventajas de reducir el tiempo de tratamiento, Moscatelli sostuvo que, en primer lugar, “tomar una medicación 60 días no es lo mismo que tomarla 30. Cuanto más uno está expuesto a una droga, más riesgo de evento adverso tiene”, precisó y remarcó la importancia de tratar la enfermedad en pediatría, porque las niñas y niños son quienes presentan menos efectos secundarios.
“Es una enfermedad pediátrica porque todo adulto con Chagas fue un niño al que nadie le dio bolilla, no lo diagnosticaron y creció con la enfermedad”.Guillermo Moscatelli
El médico detalló que en la niñez la enfermedad se cura con el tratamiento adecuado, y advirtió que “es una enfermedad pediátrica porque todo adulto con Chagas fue un niño al que nadie le dio bolilla, no lo diagnosticaron y creció con la enfermedad”.
Por otro lado, destacó que un tratamiento de corta duración permite una mejor adherencia y que los pacientes puedan completar la terapia.
Para prevenir la transmisión de madre a hijo, “lo ideal es que la mujer reciba el tratamiento antes del primer embarazo”, señaló el médico, pero explicó que como no se realizan los testeos necesarios, la mayoría de las personas gestantes se hacen el estudio por primera vez al quedar embarazadas, tal como ordena la ley nacional 26.281.
En caso de estar gestando y dar positivo en el testeo, después del parto se podrá iniciar el tratamiento para que en un próximo embarazo no corra riesgo de infección el bebé.
En este sentido, el médico detalló que realizar por única vez el tratamiento de 30 días es suficiente para erradicar la enfermedad, siempre y cuando la persona no se exponga nuevamente al foco de infección porque el fármaco no genera inmunidad.
Estudio permanente
En el Servicio de Parasitología y Chagas del Hospital Gutiérrez, a cargo de Jaime Altcheh, realizan desde hace diez años estudios con el objetivo de desarrollar tratamientos más cortos y con dosis inferiores.
Entre los logros más destacados de este equipo, la Administración de Alimentos y Drogas de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó en 2020 la primera formulación pediátrica de un medicamento contra el Chagas a partir de un estudio inédito de este grupo de médicos argentinos.
Con los resultados de la última investigación, en el Hospital Gutiérrez ya aplican la medicación durante 30 días en pacientes pediátricos como adultos y buscan impulsar esta reducción del tratamiento en todos los centros de salud del país.
“Históricamente se arrancó con tratamientos de 90 días, después se empezó a estudiar que con 60 alcanzaba. Hoy demostramos que con 30 es suficiente y ojalá podamos lograr que con 15 días también sea efectivo”, concluyó Moscatelli.