El USAT I, nombre del Satélite Universitario ideado por la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) pasó con éxito la Revisión Crítica de Diseño (CDR), un paso fundamental para dar inicio a su construcción. El trabajo fue presentado por un equipo multidisciplinario y evaluado por especialistas del campo aeroespacial. Su lanzamiento está previsto para el 2023. Entre sus funciones podrá realizar observaciones atmosféricas o del suelo.
“Todos los proyectos satelitales tienen este tipo de revisiones y esta fue nuestra última revisión de diseño, con un gran énfasis en la parte técnica y en la viabilidad de la fabricación. Vinieron a evaluarnos integrantes de la Comisión Nacional de Actividades Especiales (CONAE) y de empresas relacionadas con la industria”, detalló la ingeniera del Centro Tecnológico Aeroespacial (CTA) de la Facultad de Ingeniería, Sonia Botta, coordinadora del proyecto.
“Salió todo muy bien, fue todo un éxito. Tuvimos muchos comentarios de parte de los revisores, en su mayoría positivos, y sugerencias. Ahora sólo nos queda implementar las mejoras y seguir con el proyecto. Estamos super contentos y entusiasmados de haber atravesado esta etapa e ingresar a la siguiente”, manifestó Botta.
La iniciativa comenzó a gestarse en 2019, al año siguiente se definió la misión y en 2021 se iniciaron los trabajos técnicos. Integrantes del CTA se ocupan de la parte mecánica, térmica y de gestión de sistemas, como así también del diseño del sistema eléctrico del satélite (baterías y distribución de potencia). En tanto, miembros del grupo de Sistemas Electrónicos de Navegación y Telecomunicaciones (SENyT) del Departamento de Electrotecnia se encargan de los sistemas electrónicos.
El equipo está integrado por ingenieras e ingenieros aeroespaciales, aeronáuticos, electromecánicos y electrónicos, entre otras especialidades. Además, cuentan con la colaboración de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y de la CONAE.
El decano de la Facultad de Ingeniería y director del CTA, Marcos Actis, detalló que se encuentra en trámite la firma de un contrato para el lanzamiento en Estados Unidos, por la empresa SpaceX, en septiembre del año que viene. “Hasta ahora todo se ha hecho con recursos propios del CTA. Y estamos gestionando para que UNLP o el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación nos ayuden para pagar el lanzamiento”, indicó.
El satélite universitario es considerado un nanosatélite. “Pesa alrededor de 4 kilos y sus medidas son 10 por 10 por 30 cm. Tiene el tamaño de un pan lactal. Siempre hago esa analogía porque es muy parecido”, describió Botta.
La ingeniera detalló que la función del satélite será “la demostración tecnológica de técnicas científicas para observación de la Tierra. Podría realizar observaciones atmosféricas (presión, temperatura, humedad), según su orientación, u observaciones del suelo (por ejemplo, humedad, altimetría, rugosidad del suelo, vegetación). En principio, apuntamos a que lo haga en territorio argentino, pero como es una órbita que recorre todo el mundo está abierta la colaboración con otros países”.
Además de la fabricación del satélite se llevará adelante la integración de todo el sistema. Botta remarcó que, si bien los componentes son internacionales, los diseños son propios del proyecto. “La integración de esos sistemas también los hacemos en la Facultad. Y la parte estructural se hace con materiales comprados y se fabrican en el CTA”, afirmó.
El decano de Ingeniería agregó que, posteriormente al desarrollo de este primer satélite, el objetivo es continuar con la fabricación de otros cinco. “Sonia está haciendo el doctorado sobre este tema. Realmente va a quedar algo muy bueno porque la idea es que siempre en la carrera de Ingeniería Aeroespacial haya un proyecto de satélite en marcha para que los alumnos puedan participar”, concluyó Actis.