Por Daniel Armando Vogel – Buen día, buen domingo para todos, aunque el de hoy es gris y con amenazas de lluvia durante todo el día prácticamente, pero igual amigos, dice el dicho popular, al mal tiempo buena cara. Vamos a hablar en este espacio de alguna consideración que tiene que ver con nuestra realidad local.
Esta semana que transcurrió, terminó la celebración de la Semana de la Hipertensión en el mundo, obviamente, o sea, todos conocemos por la constante prédica de aquellos profesionales que se ocupan del metier que, reducir el consumo de sal, mantener la actividad física que haga menguar el sedentarismo, son algunos de los vitales consejos que ayudan a prevenir y a controlar esta grave situación que termina redundando en problemas cardíacos, muchos de ellos mortales.
En definitiva, la Semana de la Hipertensión nos lleva inexorablemente a hablar de salud, y como nuestra mirada está puesta en nuestra patria chica, Zárate, no podemos escaparle a un tema tan serio y grave para nuestra comunidad, que nos desnuda por completo.
Mientras que, en los últimos días de la semana transcurrida en Pilar, inauguraban un majestuoso hospital público de Emergencias y Alta Complejidad, nuestro hospital en Zárate da lástima y nuestros otros centros de salud son insuficientes y preocupan sobremanera la salud zarateña.
¿Por qué decimos esto?, simplemente por observar que hace 16 años Zárate tenía la misma o mayor capacidad de infraestructura y profesionales en salud que hoy. Cuando llegó el caffarismo había mejor oferta, mejores y más médicos dispuestos a tener por ejemplo una Guardia Pediátrica o Guardia Traumatológica, como la que hoy ya no tenemos, porque todas son pasivas.
Y mientras Pilar se convierte en el centro sanitario por excelencia del norte de la provincia de Buenos Aires con la gran oferta privada y pública en salud, los zarateños desfilamos diariamente hacia aquellos lares, a buscar esos servicios que son tan necesarios para la prevención y para la atención de la salud.
Pero claro; la mirada política de Zárate está puesta en otros temas. En festivales internacionales, en grandes canchas y gimnasios, por ejemplo, que no están mal tenerlos, pero que no tienen bajo ningún punto de vista, la misma prioridad.
El estadio Diego Armando Maradona es un ejemplo, construido desde cero; otro también lo es el gigante de Villa Fox que ha visto crecer su infraestructura mientras que, en salud nada hemos conseguido más allá de la estructura que inauguró el exgobernador Scioli llamada UPA y que después pasó a ser parte de la administración municipal.
Publicó EL DEBATE esta semana nota sobre la concientización de la hipertensión, y en respuesta a ello recibimos varios comentarios, uno de ellos da cuenta de la gravedad que tiene el cuidado de la cardiología en nuestro querido Hospital Virgen del Carmen.
Éste, lo transcribimos; ojalá sirva para no infartarnos.
“Holaaa…., es re importante el control de presión arterial, pero ¿qué valor hay si por ejemplo uno va al hospital y pide por un cardiólogo y hay solo uno y, escasamente una vez a la semana? Y completa “Lamentablemente los clínicos tienen que asumir el rol de los especialistas faltantes en tan importante especialidad”.
Y sigue “Los 2 cardiólogos que se jubilaron (sin ningún reconocimiento) iban de lunes a viernes, atendían consultorio, y sala, se encargaban de las derivaciones de los pacientes cardiovasculares, realizaban los pedidos de estudios complementarios etc.”
Completa ellos son los “Dres. Desbast y Bertolo realmente se los super extraña” completando que ahora “La única cardióloga se toma vacaciones como cualquier empleado, no queda nadie…” y remata diciendo “No, no queda a cargo nadie. Ojalá la nueva dirección, (más de lo mismo) pueda revertir semejante déficit, para que la presión arterial no sea solo un número escrito en un papel”
Está chequeado, por Multimedio EL DEBATE. Pero, Ud. mismo, puede ir y comprobarlo, también.
Queridos amigos jugamos básquet de primera, jugamos fútbol de primera, tenemos Festival Internacional de Tango. Pero, estamos en pleno descenso mundial, jugando con la salud pública de todos los zarateños.
Que tenga una buena semana.
AL QUE LE QUEPA EL SAYO…
