En conferencia de prensa el pasado miércoles, integrantes del Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate y de FeTERA expusieron las irregularidades de la causa Nasa/ Straschenco – Almirón y exigieron el cese de la persecución y la reinstalación de nuestro Secretario Adjunto Damian Straschenco.
Dentro de la sede sindical, la mesa integrada por el Secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate, Néstor Iparraguirre; su Adjunto y víctima de envenenamiento en Atucha, Damián Straschenco; el Secretario General de la Federación de Trabajadores de la Energía (FeTERA), Julio Acosta; y el asesor legal, Mariano Berges, se dirigió a la prensa para plantear fuertes denuncias, detallar las novedades en el trámite judicial y las exigencias gremiales.
En mayo de 2017, Straschenco fue envenenado en su lugar de trabajo, Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NASA, propiedad estatal), con agua pesada contaminada del reactor nuclear colocada en su botella de hidratación personal. Mientras la medición de radiación corporal anualmente permitida para quienes tienen acceso al área restringida del reactor (que no es su caso) es de 20 milisievert, él recibió una dosis de 132,7 mSv en una sola ingesta.
Straschenco venía sufriendo hostigamientos y persecución por parte de la gestión de la empresa, pero este hecho fue una bisagra, un escándalo internacional que mostró una oscura trama de complicidades para atentar contra la organización gremial.
A modo de contexto, no sólo el Juez Federal interviniente, Adrián González Charvay, nunca aceptó a la persona envenenada como querellante, sino que tomó como determinante un fantasioso relato de la patronal, que implicaba también al tesorero del Sindicato, Ramón Almirón. Así, NASA quedó como denunciante y los trabajadores como presuntos autores del delito de sabotaje.
Las víctimas transformadas en victimarios no gozaron siquiera del derecho de sumar medidas probatorias necesarias ante un juez evidentemente parcial que, posteriormente en el fuero laboral habilitaría, desaforándolo, y su despido como empleado de la firma.
Mientras, la empresa puso ‘en penitencia’ sin posibilidad de acceso a su lugar de trabajo a otro integrante del gremio que sólo declaró en calidad de testigo. “No fui la única víctima de la política neoliberal macrista, sino la más brutal porque no sólo me despidieron, sino que atentaron contra mi vida”, afirmó Straschenco.
Pasados cuatro años y medio de los hechos la causa aún no toma un curso vinculado a lo que se tiene que dilucidar: cómo en Atucha un trabajador, con el agravante de ser dirigente sindical, fue envenenado con material radiactivo, generando un enorme riesgo para su vida e integridad. Además, tampoco se revirtió el desafuero totalmente irregular e ilegal, mediante el cual el mismo juez habilitó su despido.
“El gobierno anterior tenía un mecanismo de persecución sistemático contra nuestros compañeros, con la finalidad de neutralizar la tarea sindical que llevamos adelante por reconocimiento salarial y reclamos convencionales. Tenemos que decir que lamentablemente, a pesar del cambio de gobierno, esto todavía sucede. La persecución persiste en no permitir ingresar a realizar tareas laborales y gremiales en Atucha a dirigentes de nuestro sindicato”, apuntó Iparraguirre. “Exigimos públicamente el cese de la persecución sindical contra Ramón Almirón y Gustavo Carriego y la reincorporación inmediata de Damián Straschenco”, enfatizó.
“Nos solidarizamos con nuestros compañeros. Somos una Federación que plantea otro modelo sindical. Nosotros peleamos para defender a los trabajadores y nuestro modelo es democrático. Esto es lo que las empresas no quieren y persiguen. Lo planteado es de ciencia ficción: un compañero le trae algo a otro compañero para que se suicide básicamente, a corto, mediano o largo plazo. Que el poder político tome determinaciones para terminar con la persecución que viola derechos elementales”, exigió Julio Acosta, de FeTERA.
La actualidad de NASA sigue mostrando al día de la fecha acontecimientos que no responden a los aires de cambio gubernamental. Si bien desde la entidad gremial le entregaron una carta al actual Presidente, Alberto Fernández, aún no fueron citados y por eso exigieron una reunión urgente con las autoridades nacionales.
Política contra el sindicalismo y el plan nuclear
Sobre por qué se dieron estos insólitos y aberrantes sucesos durante el macrismo, el Secretario General de Luz y Fuerza de Zárate analizó que “todo esto tuvo una trama política para destruir o cancelar lo que hizo el gobierno anterior al de Macri, que fue el que llevó adelante el desarrollo y construcción de las centrales nucleares”.
“Desde el movimiento sindical no ignoramos las metodologías utilizadas por el Gobierno Macrista que mediante el lawfare y fake news se intentaba acallar las voces opositoras a sus intereses personales, implementadas mediante la utilización del poder político, la Justicia parcial, el espionaje y los medios hegemónicos.
Hoy, y luego de salir a la luz todos los hechos, podemos deducir que fue un plan perfectamente articulado teniendo como propósito suspender o cancelar el Plan Nuclear en la Argentina, y silenciar a todas las voces que lo defendían”, consideraron los dirigentes.
Tampoco tomaron como casual que, a un año de lo sucedido, medios afines al macrismo (TN y Noticiero Central de Canal 13), realizaran dos informes de más de 7 minutos, justo unos días antes de la reunión cumbre de países del G-20 en nuestro país, en el año 2018. “Tampoco fue una casualidad que esto sucediera y coincidiera con ciertas recomendaciones de la OIEA (Organización Internacional de Energía Atómica), que por ese entonces ya inducía y declaraba a los sindicatos como un posible factor de peligro para la actividad nuclear, llegando, incluso a compararlos con el terrorismo internacional”, indicaron.
Sólo incluyendo esas lecturas puede explicarse por qué habiendo pasado más de cuatro años de los hechos, al día de hoy el dirigente sindical Gustavo Carriego, que fue convocado sólo y únicamente como testigo en la causa penal, sigue teniendo prohibido el ingreso a su puesto de trabajo, en NASA.
“Una persecución inaudita”
El abogado defensor con larga trayectoria en la justicia federal, como abogado y como juez, Mariano Bergés, denunció que “esto fue una persecución inaudita. Tengo 25 años en Tribunales y 12 de Juez Federal y para mi esta es una situación extraña, muy rara. Era fácil seguir el expediente y advertir una persecución judicial importante que tiene nombre y apellido: el juez federal Adrián González Charvay. Advertimos irregularidades sostenidas por el mismo juez presentados por la empresa y de datos falsos”.
La hipótesis presentada por NASA y adoptada sin titubeos por González Charvay se montó sobre un supuesto sabotaje planeado entre Almirón y Straschenco, para que este último se autoenvenenara.
Para ello debía poder ubicar a Almirón y la muestra de agua en la planta en la que él se desempeña, o se derrumbaría el relato de la empresa. Lo que, efectivamente, sucedió; a raíz del informe del peritaje oficial de la ARN.
“El juez dio el auto de procesamiento sin aceptar una de las medidas de pruebas que solicitamos, entre ellas el peritaje químico”, recordó el abogado. Cuando finalmente se realizó el peritaje del agua, aunque los peritos de parte llegaron a conclusiones opuestas, la Autoridad Regulatoria Nuclear como perito oficial afirmó que el agua consumida por Damián podía ser de la planta 1, de la 2 o una combinación de ambas. Pensemos que la empresa quiso ubicar a un empleado integrante del sindicato en la planta 1 para armar esta historia que se cae por sí misma”, relató Bergés.
Actualmente, hace 2 meses que el expediente está a la espera de que el juez resuelva. “Pedimos que el sobreseimiento de los dos imputados. Si esto no ocurre que, al menos, se declare falta de mérito y se continúe con hipótesis que nosotros fuimos planteando, y se investigue a las personas que señalamos”.
Otro punto insólito del trámite judicial que señaló el abogado, fue el que afecta a un tercer integrante del sindicato, también trabajador de ATUCHA.
“En el caso de Gustavo Carriego también fue separado de la planta, lo mandaron simbólicamente a un rincón a trabajar, y ni siquiera el juzgado le tomó declaración indagatoria, sino que después de mucho tiempo a pedido nuestro se le tomó una declaración testimonial. Es el primer caso que conozco en un expediente que un testigo está sometido a ese tipo de persecución gremial”, profundizó el abogado.
De este modo queda demostrado que la actuación judicial no tan solo fue parcial, si no totalmente direccionada por una falsa e irregular investigación llevada adelante por una Comisión Investigadora formada exclusivamente por funcionarios de NASA.
Una Comisión Investigadora que hoy, a más de cuatro años, no puede explicar las insalvables contradicciones que surgen donde se muestra una manipulación y ocultamiento de información con el fin de forzar un relato y dar por cierto hechos que en la realidad no ocurrieron. O lo que es mucho peor todavía, direccionar la investigación para ocultar lo que realmente sucedió en el 9 de mayo del 2017.
“Debido a que el Juez Federal, no buscó ninguna otra línea de investigación o hipótesis a seguir, la Cámara Federal de San Martin, con un criterio imparcial, intentó profundizar sobre elementos que no fueron considerados.
De allí surge que fue la misma Cámara Federal le dicta la falta de mérito a Ramón Almirón por no encontrar ningún indicio o certeza sobre las infundadas acusaciones que NASA y el Juez hicieron sobre él.
Ratificamos nuestra denuncia al Juez Federal González Charvay ante el Consejo de la Magistratura, porque todo esto ha dejado en claro, que lejos está de garantizarnos imparcialidad, sino que es parte de la trama del encubrimiento que se pretende llevar adelante”, dijeron los dirigentes.
Straschenco recordó que durante el 2016 el Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate venía protagonizando una serie de conflictos, defendiendo los puestos de trabajo y el plan nuclear.
Asimismo, apuntó a “personajes nefastos” que llevaron y llevan adelante la persecución: Faustino Lavia, marino retirado con un pasado oscuro, el ex juez Conrado Bergesio, hoy defensor de NASA, fue quien estuvo a cargo de la causa de los hijos de Herrera Noble y la durmió siete años, fue posteriormente echado. “Me pregunto qué tiene que ver Conrado Bergesio con este gobierno, siendo que defiende una empresa del Estado Nacional”, interrogó.
“Solicitamos a las autoridades nacionales que presten la debida atención a este caso, con el fin de entender que funcionarios con actitudes antidemocráticas o peor aún que fueron parte de la historia más triste de nuestro país no puedan seguir siendo parte o representantes de una empresa del estado nacional”, exhortaron desde el Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate.
Finalmente, subrayó que en Atucha continúan pasando cosas graves, en torno a lo salarial y a la pandemia, que incluso se llevó la vida de trabajadores.
“El ataque no fue a mí, a Damián Straschenco, sino que fue a un Sindicato que representa a los trabajadores/as en un momento complicado en la Argentina. El gobierno tiene que hacerse eco, de una vez por todas de esta situación.
No se explica que un gobierno democrático sostenga esto. Planteamos la inmediata reincorporación de Straschenco y el cese de la persecución a nuestros compañeros.
Esto sigue teniendo como objetivo descabezar a toda una conducción sindical. Yo no quiero que el poder ejecutivo intervenga la justicia, pero es una empresa estatal que esta bajo su directa responsabilidad y sigue protagonizando hechos de gravedad institucional con funcionarios siniestros que siguen actuando en representación de NASA. Quiero que las autoridades nacionales nos escuchen. Nosotros seguiremos luchando por nuestros compañeros”, concluyó.
Comisión Directiva Sindicato de Luz y Fuerza de Zárate
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