Con un protagonismo marcado por los sitios online y el poderío de Meta, las personas se informan y encuentran en el celular su dispositivo de acceso. La falta de confianza y el cuidado por la salud mental son algunos de los motivos que explican la caída en el consumo de noticias.

Con apenas un 35% de confianza ante las noticias, los argentinos se informan principalmente por sitios online y redes sociales, donde el poder indiscutible se lo lleva Meta con sus plataformas Facebook y WhatsApp a la cabeza, mientras que el celular sigue ocupando el lugar privilegiado como dispositivo de entrada a la información (75%), según detalló este miércoles el Informe sobre Noticias Digitales en 2022 del Instituto Reuters de la Universidad de Oxford.

Con una penetración de internet del 91% en el país, un 46% de los encuestados comparte noticias a través de redes sociales, plataformas de mensajería o mail.

En particular, las plataformas más usadas para acceder a las noticias son propiedad de Meta: Facebook (56%), WhatsApp (35%) e Instagram (31%), las cuales encabezan el ránking y evidencian así el poder dominante del grupo corporativo de Mark Zuckerberg.

La lista sigue por YouTube (27%), Twitter (13%) y Facebook Messenger (7%), según el informe, donde se señala a la Argentina como uno de los países con “los niveles más altos en el uso de redes sociales” en el planeta.

“Meta es una de las empresas más poderosas del mundo y en lo que hace a la comunicación. Por ende tiene una presencia muy fuerte en la vida informativa de las personas en Argentina y en el rol que juegan en el ecosistema de medios”, explicó a Télam Pablo Boczkowski, investigador junto a Eugenia Mitchelstein del apartado sobre Argentina del informe de Reuters.

Pero es llamativa la presencia de WhatsApp ya que si bien se constituye como una aplicación de chats, se vuelve poderosa al ocupar el segundo puesto como fuente de noticias dentro de la categoría de redes sociales.

“WhatsApp es técnicamente un servicio de mensajería, pero la manera en que es utilizado y especialmente en su funcionalidad de grupos lo transforma en una plataforma a través de la cual se comunican muchas cosas, entre ellas, noticias. Entonces, a nivel agregado termina teniendo un alcance propio de un medio de comunicación”, amplió Boczkowski.

El celular es el principal dispositivo para acceder a las noticias (75%), cifra que se mantuvo constante en los últimos años. En cambio, el porcentaje de los que utilizan la computadora de escritorio para estar informados cayó unos puntos hasta llegar al 27%.

Como fuente de noticias, los sitios online ocupan el podio elegido por los encuestados para informarse (con el 84%), seguido por las redes sociales (69%), la TV (63%), y muy por debajo los medios impresos (19%).

La escucha de podcasts también ha aumentado significativamente en Argentina, al pasar del 29% al 34%  en el último año.

Pero uno de los datos que se alertó en el informe es el grado de desconfianza que sienten las personas ante las noticias a nivel global, además de una saturación que las aleja de los medios para preservar su salud mental.

En Argentina, solo un 35% de los encuestados manifestó confiar en las noticias, mientras que en otros países de la región ese índice aumenta al 48% en Brasil y 41% en Perú. No obstante, en otros países como Estados Unidos o Francia e Inglaterra esos porcentajes son inferiores al 30%.

“Que las personas en Argentina tengan un alto nivel de desconfianza en las noticias ha sido un fenómeno histórico y se ha agudizado en los últimos años. Eso significa, en parte, que los medios de comunicación no solo deben presentar los hechos sino, además, hacerlo de una manera convincente dado que la actitud por default de la gente es la de no creer”,  expresó Boczkowski.

El informe es un extenso documento donde se muestran datos sobre el consumo de noticias digitales, basados en encuestas a más de 93.000 personas en 46 mercados -incluida la Argentina- que cubren la mitad de la población mundial.

Mientras la vida en el país volvía a la “normalidad” tras la cuarentena por la pandemia, “el consumo de noticias se fue estancando o disminuyendo, y también pasó lo mismo con la confianza en las noticias”, se comunicó en el informe.

“Son varios factores los que pueden influir en la desconfianza, que en general en Argentina se extiende también hacia la justicia y otras instituciones que están en grave crisis de legitimidad”, sostuvo a Télam Pablo Hernández, director de investigación, análisis y monitoreo de la Defensoría del público.

Asimismo remarcó que en el informe se consigna que Argentina tiene niveles de credibilidad superiores a Estados Unidos (26%), Francia (29%) o el Reino Unido (34%), por ejemplo.

Otro de los factores, continuó, tiene que ver con la “crisis de cierto periodismo, es decir, la crisis de representatividad que los periodistas tenían en el sistema masivo respecto de la gran comunidad de las audiencias”.

“Representatividad que se vio afectada por la aparición de nuevos medios con sus respectivas comunidades. Por lo tanto, nuevas comunidades, nuevas formas de circulación de sentido y nuevas formas de producir información por parte de comunidades, periodistas o influencers, que sería otra de las discusiones”, amplió el especialista.

En el informe también se señala que uno de los efectos clave de la pandemia en los medios fue una aceleración en el declive de los periódicos impresos. La circulación cayó un 21% desde 2020, lo que obligó a que los editores se centren en las suscripciones digitales.

Pero más allá del enfoque editor, el estudio manifiesta una caída en el consumo de noticias desencadenada por múltiples factores, siendo el principal manifestado por los encuestados que hay muchas noticias vinculadas con la política y el covid (43%).

También se habla de que las noticias impactan de forma negativa en el ánimo (36%), que hay un desgaste mental por la saturación de noticias (29%), que las noticias tienen sesgos o no son dignas de confianza (29%), mientras que un porcentaje menor (16%) expresa que no tiene nada que pueda hacer con la información.

POR MELISA AVOLIO (Télam)