Marielle Franco, de 39 años, viajaba en un auto en pleno centro de Río de Janeiro con su chofer y una asesora, cuando otro automóvil se puso a su lado, disparó nueve tiros y luego huyó. La concejal y el chofer murieron en el acto, mientras que la asesora sufrió únicamente heridas leves.
En el comunicado se puede leer lo siguiente:
El Partido Socialista repudia el brutal asesinato de la activista defensora de los derechos humanos en Brasil Marielle Franco, quien fuera atacada a tiros la noche del miércoles 14 de marzo.
Nacida en una favela, Marielle fue una popular política, socióloga y activista de Rio de Janeiro que denunciaba el racismo y la violencia policial. Era miembro del partido Socialismo y Libertad (PSOL) y conocida activista social de 38 años. “Apoyaba proyectos para castigar el acoso en espacios públicos, en defensa de casas de parto y del aborto legal. En las redes sociales, se posicionaba contra el racismo y la violencia policial. En su última publicación, divulgó un video del encuentro de mujeres negras en Lapa, en la región central, poco antes de ser asesinada”.
Luego del crimen, centenares de personas acudieron a las puertas de la Cámara Municipal de Río de Janeiro para asistir al funeral de la concejala brasileña. Franco se había convertido en una dura crítica de la intervención del Ejército en la seguridad de Río de Janeiro.
Los manifestantes, cerca de 3 mil personas, recorrieron parte del complejo de favelas de Maré, uno de los barrios más violentos de Río de Janeiro donde Marielle luchaba para cambiar la realidad de sus habitantes.
Franco denunciaba el racismo en la sociedad brasilera y sorprendió a muchos al ser electa legisladora municipal en 2016. Ganó fama durante su mandato como defensora de los derechos humanos, especialmente por sus denuncias contra la violencia policial en las empobrecidas barriadas brasileñas.