Referentes de más de 35 entidades se reunieron para reclamar medidas más estrictas al Estado. El objetivo: retrasar la edad de inicio del consumo.
“El alcohol es adictivo y perjudicial para la salud, y no debe considerarse como un artículo de consumo ordinario o de necesidad, ya que es el principal motivo de consultas de los servicios de emergencia por problemas vinculados al consumo”, indican 37 referentes de entidades como la Sociedad Argentina de Pediatría, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, la Fundación Trauma, la Asociación Toxicológica Argentina, la Sociedad Argentina de Medicina Interna General, la Asociación Psiquiatras Argentinos y unidades del Conicet en universidades. Juntos crearon el Equipo de Promoción y Prevención Intersectorial de Consumo de Alcohol (EPPICA).
Sus integrantes proponen las medidas regulatorias que aconseja la Organización Mundial de la Salud: reducir y controlar los puntos de venta; prohibir la publicidad, la promoción y el patrocinio; implementar advertencias sobre el daño a la salud en los envases (tal como ocurre con los cigarrillos); fijar políticas de precios; penalizar a conductores alcoholizados; aumentar la detección y las intervenciones breves en las consultas de salud.
Fuente: Clarín