Se trata de pigmentos de color rosa brillante que datan de hace 1.100 millones de años.
Aunque resulte sorprendente, el color más antiguo del mundo en el registro geológico es el rosa brillante, según una nueva investigación llevada a cabo por un equipo internacional de expertos y recogida en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
Los científicos extrajeron el pigmento de las bacterias fósiles preservadas en rocas bajo el desierto del Sahara en Mauritania, en África Occidental. Dentro de esas bacterias descubrieron que la clorofila, un pigmento utilizado hoy en día por las plantas para la fotosíntesis, data de hace unos 1.100 millones de años. Eso es aproximadamente 600 millones de años más antiguo que los fósiles de clorofila similares encontrados anteriormente.
Sus hallazgos sugieren que las cianobacterias, bacterias que sobreviven con la luz solar, aparecieron mucho antes que las algas, que se remontan hasta hace 650 millones de años. Y las bacterias probablemente dominaron los antiguos océanos de la Tierra durante cientos de millones de años.
La clorofila es lo que da a las plantas modernas su color verde, eso ya lo sabemos; sin embargo, la clorofila fosilizada en las muestras de cianobacterias era de color rojo oscuro y de color morado oscuro en su forma concentrada, informaron los científicos.
Cuando pulverizaron los fósiles para analizar las moléculas de bacterias, destilaron los colores y el resultado fue un rosa brillante. Este sugiere que los antiguos organismos que absorbían la luz del sol arrojaban un tinte rosado a un océano desaparecido, aclara Nur Gueneli, de la Escuela de Investigación de Ciencias de la Tierra de la Universidad Nacional Australiana (ANU) y líder del trabajo.
Pasaron algunos cientos de millones de años hasta que las algas comenzaran a multiplicarse, formando finalmente la base de una red trófica que eventualmente alimentaría la evolución de animales más grandes. Pero, hasta el surgimiento de algas y organismos más complejos, el planeta pertenecía a las bacterias.
Así las cosas, los océanos cianobacterianos comenzaron a desaparecer hace unos 650 millones de años, momento en el que las algas comenzaron a diseminarse por el planeta y donde, posteriormente, los animales grandes, incluidos los humanos, prosperarían.
Fuente: Muy Interesante